Washington, 17 sep (PL) Un saldo de seis policías y cuatro civiles heridos, tres en estado crítico, dejaron hoy sendos tiroteos en las ciudades estadounidenses de Philadelphia y Fort Worth, y en ambos casos los atacantes fueron ultimados.
En Philadelphia, un individuo le disparó a un policía en plena calle y en su huída hirió a cuatro civiles, hasta llegar a un callejón donde le pegó un balazo a otro uniformado, antes de ser abatido mortalmente.
Richard Ross, comisonado de la Policía en la llamada Ciudad del Amor Fraternal, afirmó que la víctima poseía un papel con un mensaje contra un oficial de libertad condicional.
Dos de los civiles heridos recibieron disparos en el pecho y continúan en estado crítico, en tanto los policías heridos ya abrieron los ojos y están hablando.
En Fort Worth, Texas, dos oficiales acudieron a una morada en respuesta al reporte de un supuesto suicidio, y encontraron a una persona herida de bala y a un sospechoso escondido en un cobertizo del patio trasero.
Al intentar establecer contacto, el sospechoso abrió fuego, hiriendo a ambos oficiales, uno de ellos de gravedad, y fue ultimado luego por un equipo SWAT.
Ambos incidentes tributan a la espiral de violencia relacionada con la policía en Estados Unidos, un círculo vicioso que se ha cobrado centenares de vida en lo que va de año.