Panamá (PL) Más allá de bellas playas, cristalinas aguas y radiante sol, cualidades por las que resalta Cuba en el mundo, la isla es un destino turístico que sobresale por su potencial humano y la autenticidad de su gente.
Así resume Sobeida Feliz, directiva de Warwick International Hotels, su visión sobre el turismo en la mayor de las Antillas, un sector con «un potencial inmenso, dado su tamaño físico, capacidad de habitaciones y crecimiento exponencial con respecto a los demás destinos del Caribe».
La gracia del cubano, el nivel de servicio que desea brindar a las personas y la capacidad de ser anfitriones en su propio país, resulta incomparable con ningún otro país de la región, aseguró la especialista, para quien la autenticidad es otro de los rasgos distintivos del turismo hecho en la nación caribeña.
«Al cliente le gusta la sonrisa del cubano, cómo construyen todo un sueño de la nada, el querer servir y hacer un poquito más de lo que ellos esperaban, y todo ello de corazón, no porque quieran algo. En eso radica la autenticidad del pueblo cubano», sentenció Feliz.
Warwick International Hotels es una compañía con casa matriz en París, Francia, que posee más de 50 hoteles en Europa, Asia, Medio Oriente, Pacífico y Norteamérica, con perspectiva de ampliación en América y el Caribe, siendo Cuba la puerta de entrada a esta última región.
Para ello cuentan desde hace un año con Warwick Cayo Santamaría, un hotel con 800 habitaciones, las cuales fueron posibles gracias a la colaboración brindada por la empresa Gaviota, dueña de esa instalación.
«Cuba es un destino súper interesante, pues está en el corazón del Caribe y es muy popular en Europa y el resto del mundo, de ahí nuestro interés de ampliarnos, por lo que nos gustaría incursionar en los hoteles de ciudad», explicó.
Por lo pronto al Warwick Cayo Santamaría, cuyo principal mercado es Canadá, se añade un hotel en Varadero con 124 habitaciones, que a finales de este año podría sumar 443, a partir de una inversión multimillonaria.
Con la apertura total del hotel en el principal balneario de Cuba, la compañía francesa pretende ampliar la presencia de clientes de otras nacionalidades, gracias a las facilidades aéreas que ofrece esa zona del occidente de la isla.
Aunque Warwick International Hotels apostó también a Bahamas, tras la apertura este año de un hotel, Feliz reconoció que ningún otro país del Caribe tiene ahora mismo, el crecimiento que posee la mayor isla de las Antillas.
«La expectativa y curiosidad de la gente por conocer y visitar Cuba hará que pronto el país no tenga capacidad suficiente para aguantar la avalancha, sobre todo en los destinos de ciudades, que es lo que más busca la gente cuando visita la isla, pues desea conocer su cultura», aseveró la ejecutiva en entrevista con Prensa Latina.
«Nuestros clientes se caracterizan por la variedad de las nacionalidades que representan y la fidelidad a la marca Warwick, a los cuales hemos sido capaces de satisfacer sus expectativas», apuntó.
Pese a que la compañía se especializa en operar hoteles de ciudad, posee algunos de playa en las islas Fiyi, en el sur del océano Pacífico, donde el cliente tipo no se asemeja al que vista la isla caribeña.
«Cuba tiene mucho que ofrecer, que no es solamente mar y playa. Realmente hay mucho que hacer: ecoturismo, cultura, historia y mucho más que ningún otro destino en el Caribe», sentenció.
TURISMO CUBANO ABRE HORIZONTES EN EL INTERIOR DEL PAÍS
Centros turísticos de alta clase, balnearios con infraestructura para los visitantes, ciudades bien conservadas, entre otras facilidades, sirven de base a un desarrollo humano de alta instrucción y sólidas raíces culturales en su identidad nacional.
La oferta turística cubana concentra hoy sus esfuerzos en comercializar el centro y el oriente de la Isla, afirmó a Prensa Latina la directora de Comunicación y Promoción del Ministerio de Turismo en la isla, Yanet Ayala, durante su visita en mayo último a Panamá como parte de la Feria del sector.
Insistió en que, si bien La Habana es lo más conocido en el mundo junto al balneario de Varadero, por ejemplo, en el norteño archipiélago Jardines del Rey, algunos cayos como Santa María, a casi 400 kilómetros al este de la capital, tienen playas maravillosas que constituyen agradables atractivos para los turistas.
Tenemos también en esa región central ciudades patrimoniales que cumplieron medio milenio de fundadas, como Trinidad y Sancti Spíritus, mientras que en el oriente están Camagüey, Bayamo, Santiago de Cuba y Baracoa, expuso.
La oferta se complementa con opciones de senderismo ecológico, deportes náuticos, productos de naturaleza como contemplación de paisajes, flora y fauna terrestre, arqueología, submarinismo, hoteles de cuatro y cinco estrellas y aeropuertos internacionales (10 en el país) para facilitar la conexión.
A su vez, la ampliación de los vuelos de la aerolínea panameña Copa a Holguín y Santa Clara, favorece el propósito de promover esos destinos turísticos, aseveró Ayala.
La funcionaria destacó el esfuerzo que se realiza para incrementar la capacidad hotelera habanera y enfrentar de esa manera la alta demanda existente en estos momentos, estimulada por algunos sucesos mediáticos que tomaron a la ciudad como centro.
Mencionó sitios emblemáticos de la urbe capitalina donde se restauran y construyen edificios para alojamiento, como la Manzana de Gómez, antaño centro comercial ubicado en la Habana Vieja y antiguos hoteles con valores patrimoniales en su arquitectura.
Sobre el turismo de cruceros señaló que en abril cerró la temporada del presente año, en el cual importantes compañías atracaron en puertos cubanos, como MSC, Crystal, Thomson y que con la apertura de Carnival se inició una nueva ruta de este tipo desde Estados Unidos.
Acerca de la supuesta competencia en el turismo que algunos países de la región ven en la isla por el restablecimiento de relaciones diplomáticas con Estados Unidos, Ayala resaltó que aún se mantienen las prohibiciones estadounidenses de viajes turísticos para sus nacionales, y solo pueden hacerlo algunos mediante licencias especiales.
Pero, acotó, que a pesar de todo lo que suceda, Cuba «seguirá apostando por sus mercados emisores tradicionales que durante estos años trabajaron con nosotros, los cuales no desatenderemos».