Washington, 20 nov (PL) Partidarios del movimiento Derecha Alternativa (Alt-Right) en Estados Unidos celebraron en esta capital la reciente victoria electoral del republicano Donald Trump.
Richard Spencer, presidente del Instituto Nacional de Política, una de las caras más visibles de la Alt-Right y partidario de expulsar de Estados Unidos a negros, latinos, asiáticos y judíos, expresó anoche que su movimiento y Trump «tienen una conexión psíquica más profunda, de una manera que simplemente no tenemos con la mayoría de los republicanos».
Aseguró estar convencido que Trump y el movimiento Alt-Right se complementan entre sí, a pesar de no creer que el multimillonario neoyorquino sea un miembro del movimiento que se asoció con el racismo y el antisemitismo, destaca el sitio digital Polìtico.com.
Spencer añadió que los partidarios de Alt-Right propondrían a la nueva administración Trump una moratoria de inmigración por 50 años, que permita sólo que los blancos europeos lograran una nueva ciudadanía en Estados Unidos.
Cuando se le preguntó si eso era realmente posible, Spencer respondió, «es obviamente posible».
La Derecha Alternativa (Alt-Right) es un conjunto de ideologías de derecha que rechazan la corriente principal del conservadurismo en Estados Unidos y tiene gran actividad en Internet.
La mayoría de los miembros de esta ideología son descritos como jóvenes, adictos a las teorías conspirativas, antiestablishment, con gran capacidad de activismo en internet y se oponen al multiculturalismo y la inmigración.
Se sustenta del nacionalismo blanco, la supremacía blanca, la islamofobia, el antifeminismo, la homofobia, el antisemitismo, etnonacionalismo, populismo de derecha, nativismo, tradicionalismo, y el movimiento neorreaccionario.