Washington, 26 ene (PL) Como parte de una tendencia creciente, empleados de la NASA crearon hoy una red de cuentas no oficiales en la plataforma Twitter, como forma de resistencia al presidente Donald Trump.
De esa forma, la Administración estadounidense de la Aeronáutica y el Espacio (NASA) se une a más de una docena de agencias federales del país norteño que tratan de desafiar lo que ven como intentos del jefe de la Casa Blanca de acallar la investigación gubernamental sobre cambio climático y otras ciencias.
Los científicos de la EPA (Agencia de Protección Ambiental), la NASA y otras instituciones lanzaron en privado cuentas de Twitter -prestando nombres y logotipos de sus agencias- para protestar contra las restricciones que consideran como censura, y proporcionar plataformas sin restricciones para la información que la nueva administración tiene limitada.
La cuenta @RogueNASA se presenta en Twitter como «el equipo de Resistencia no oficial de la NASA»; la misma llama a los lectores a seguir su actividad con datos y noticias sobre ciencia y clima, y en solo horas ya supera el cuarto de millón de seguidores.
La rápida proliferación de esos tuits responde a las directrices internas por parte del gobierno que varias agencias involucradas en temas ambientales han recibido desde la toma de posesión de Trump, exigiéndoles que frenen su difusión de información al público.
La semana pasada, se le dijo al personal del Departamento Interior que dejara de publicar en Twitter después de que un empleado retuieó mensajes sobre la asistencia relativamente baja a la toma de posesión de Trump, y sobre cómo desapareció el material sobre el cambio climático y los derechos civiles del sitio web oficial de la Casa Blanca.
Desde entonces, empleados de la EPA y de los departamentos de Interior, Agricultura, y Salud y Servicios Humanos han confirmado haber visto avisos de la nueva administración, ya sea para instruirlos para eliminar páginas web o limitar su comunicación al público, incluso a través de las redes sociales.
Dichas restricciones han reforzado las preocupaciones de que Trump, un escéptico del cambio climático, está intentando silenciar la investigación respaldada por el gobierno federal, mostrando que las emisiones de la combustión de combustibles fósiles y otras actividades humanas están contribuyendo al calentamiento global.
Ahora, debido a que las entradas de Twitter fueron creadas y publicadas de forma anónima como cuentas privadas, están fuera del control del gobierno.