(Agencias) El Barcelona sumó una victoria práctica ante el Atlético de Madrid (1-2), primero superviviente con un ejercicio de resistencia y después con dos golpes en ataque, los dos con algo de fortuna y el último del argentino Lionel Messi para deshacer el empate e insistir en la lucha por el título de la Liga.
Demasiado castigo para el conjunto rojiblanco, que propuso mucho y que se quedó sin nada a la misma vez que se aleja de sus objetivos; también mucho premio para el equipo azulgrana, que aún aguarda su mejor nivel pero que hasta entonces ganó en el Vicente Calderón.
El equipo azulgrana alcanza provisionalmente el primer lugar de la liga a la espera de lo que haga este día el Real Madrid en su visita al Villarreal.