Ciudad de México, 8 abr (PL) La izquierda latinoamericana y las fuerzas progresistas de América Latina están llamadas a retomar el impulso, con el aliento que significó la victoria de Lenin Moreno y Alianza País en Ecuador, y la necesidad de revertir retrocesos en Brasil y Argentina.
Para el politólogo argentino Atilio Borón lo que sucedió en esas dos naciones sudamericanas no significan procesos consolidados hacia la derecha, ni marcan el fin de un ciclo histórico iniciado en 1999 en Venezuela con el triunfo de Hugo Chávez.
En entrevista para Orbe, Borón recordó que en Brasil el orden constitucional y la legalidad del sistema político fueron atropellados por un golpe de Estado «por más que le apelliden institucional».
Apuntó que la corrupción que rodea a Michel Temer y a otras figuras clave en el golpe de Estado contra Dilma Rousseff pudieran decidir elecciones anticipadas, con elexpresidente Lula da Silva como candidato el mejor posicionado.
La administración de Mauricio Macri en Argentina enfrenta enormes dificultades económicas y ha precipitado un nuevo auge de las luchas y manifestaciones populares que ponen en serio cuestionamiento su estabilidad a futuro, dijo el académico argentino.
Por su parte, a Lenin Moreno le tocará ahora reimpulsar el proceso de cambios, fomentar la unidad y enfrentar a una derecha acérrima en Ecuador, acotó.
Otro país con perspectivas para los sectores progresistas es Paraguay, que vivió momentos de violencia política y donde el expresidente Fernando Lugo aventaja a sus rivales para los comicios de 2018.
Para Medardo González, secretario general del FMLN, el partido de la exguerrilla gobierna en El Salvador en medio de una correlación de fuerzas difícil frente a los representantes de la oligarquía.
Estamos avanzando en políticas sociales, en el enfrentamiento a la inseguridad, con la estrategia y el empeño de continuar acumulando caudal político, dijo recientemente en un seminario de agrupaciones políticas organizado por el Partido del Trabajo de México.
También en México estuvo Adán Chávez, vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, y ministro de Cultura en el gabinete del presidente Nicolás Maduro.
En conversación con Orbe expresó que gobierno bolivariano pasó la prueba más difícil del golpismo durante el 2016, y ahora está en el camino de la recuperación.
Pasamos el vendaval, lo reconocemos, y el panorama hoy día es de recuperación, de avance, sobre todo gracias al legado de Hugo Chávez, incrustado en el alma y la mente de la mayoría de nuestro pueblo, dijo.
Mencionó medidas gubernamentales en unión con sectores populares como la implementación de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) para superar el desabastecimiento de alimentos básicos y medicamentos, ingrediente de la guerra económica.
Hoy llegamos a seis millones de familias en todo el país, lo cual multiplica el número de venezolanos beneficiados con el acceso a los alimentos y medicinas, fundamentó.
Pese a la difícil situación económica, incluidos los bajos precios del petróleo, el gobierno venezolano mantiene la inversión social en educación, salud, vivienda y otros sectores donde la tarea es ser más eficientes, añadió.
Ecuador, Argentina, Brasil, Venezuela, por citar algunos países, resultan experiencias distintas en medio de la lucha de clases, que tiene auges, retrocesos, estancamiento, en un contexto internacional difícil, pero en el que las fuerzas de izquierda y progresistas de la región están en la batalla.(Tomado de Semanario Orbe).
América Latina:las batallas de la izquierda
Por Orlando Oramas León