Organizaciones civiles y académicos lamentaron que el Senado haya ratificado a Paloma Merodio como vicepresidenta del INEGI, a pesar de no cumplir los requisitos legales y de que mintió al presentar su currículum.
En un pronunciamiento conjunto, consideraron que se trata de un precedente preocupante ante los próximos nombramientos que realizará el Ejecutivo y el Congreso para vacantes en órganos autónomos, a los que consideran fundamentales para el funcionamiento de la democracia.
Fuente: Notisistema