Aunque Coahuila no fue el primer estado en implementar un seguro escolar lo cierto es que en algunos estados del país como Tamaulipas y el Estado de México ya operaba uno, también lo es que ellos fueron enfocados exclusivamente en algunos casos a la educación pública básica y su cobertura en gastos médicos es menor, a diferencia del que aplica en el estado posgrado tanto en escuelas públicas como privadas, así como al personal directivo, docente, administrativo y manual de las diferentes instituciones del Sistema Educativo Estatal.
Precisamente anunciado en el 2007 durante la celebración del Día del Maestro, entró en operación este seguro para todas las escuelas siendo una novedad, toda vez que en su gran mayoría no contaba con seguros privados para cubrir los gastos médicos que genera un accidente al interior del plantel o en el trayecto y dejaban a los padres de familia la decisión a qué institución médica llevaban al alumno, por lo regular a hospitales públicos.
Sin embargo, en las escuelas privadas la situación fue diferente, toda vez que en ellas la regla era contar con un seguro privado contra accidentes escolares, a la fecha estos últimos continúan operando en esos planteles a pesar de que también tienen acceso al Seguro Escolar Coahuila.
En el 2007 para la Asociación de Padres de Familia (AEPAF), consideraron la implementación del Seguro Escolar Coahuila como un acierto que beneficiarían al sector educativo, siendo un servicio que reciben sin que tengan hacer alguna inversión, aunado a que les daría una tranquilidad y seguridad a las familias coahuilenses.
Con la implementación de este programa se hizo hincapié en que en uno de los aspectos importantes fue la cultura de la prevención de accidentes que se realiza a través de la Secretaría de Educación cultura en la población tanto entre los padres, como con maestros y alumnos, la que les permitió prevenir accidentes, como las acciones a seguir cuando estos se fueron presentando.
A sus 10 años de implementación de seguro obligatorio para escuelas de gobierno, así como las privadas en el estado de Coahuila, miles de niños y niñas han sido atendidos en hospitales privados por causas de accidentes dentro de las instalaciones educativas, así como durante su trayecto evitando tener que llegar a tragedias por las largas esperas en las salas de urgencias de los Hospitales Generales, así como aquellas del Seguro Social o Issste.
Algo que en su momento fue criticado como un programa que no serviría porque sería uno más de la lista larga de “programas populares”, fue en realidad un acierto y tranquilidad para muchos padres de familia que con la incertidumbre económica de qué podían hacer si alguno de sus hijos sufriera un accidente dentro de las escuelas, ahora pueden estar seguros que serán atendidos, pero sobre todo velando por la seguridad de los hijos.
Esto también permitió que las mismas instituciones educativas se percataran cuáles eran sus puntos vulnerables dentro de las instalaciones y en qué horarios sucedían la mayoría de los accidentes para darle una solución e ir bajando el índice de accidente tanto para los alumnos, así como para personal docente.
Todavía hay mucho por hacer ya que existen propuestas de padres de familias que se incremente la suma asegurada cuando los accidentes sean más graves, toda vez que, si bien son excepcionales, si requieren de una suma mayor en la cobertura.
Esta situación beneficiaría más a las escuelas públicas que no cuentan con seguro privados para cubrir esos gastos, a diferencia de las escuelas particulares, pero habrá que esperar par a ver que se toma en consideración para los siguientes ciclos escolares. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org