Ciudad de México (N22/Redacción).- Un equipo de investigadores del Centro Nacional para la Investigación Científica (CNRS) de Francia lograron explicar algo que, hasta ahora, creíamos insólito: la posibilidad de caminar sobre el agua.
Aseguraron que “la clave está en un equilibrio de fuerzas” si entendemos el comportamiento de un fluido no newtoniano. Es decir, esto sucede si en el proceso participan fuerzas repulsivas de corto alcance, ya sea de origen físico-químico o electroestático, que facilitan que un líquido se convierta en sólido en ciertas coyunturas.
Este descubrimiento también permitirá -mediante la manipulación de estas fuerzas- una gran cantidad de nuevas aplicaciones: conseguir chalecos antibalas más ligeros, ropa deportiva más ligera pero muy resistente en caso de choque o hacer que los cementos sean mucho más sólidos. La clave está en la deformación y el fluir de la materia.
Los científicos probaron su teoría en un modelo de partículas de silicio, comprobando que al disminuir la presión de la fuerza repulsiva (que es la que mantiene separadas a las partículas), el estado líquido desaparecía y la suspensión resultante se volvía completamente sólida. Todo fruto de una transición friccional.