México, 5 sep (PL) La Cámara de Diputados de México está al borde de la parálisis por el bloque de legisladores de tres partidos que se oponen a avalar la integración de la mesa directiva que hoy debe comenzar sus actividades.
Los congresistas opuestos pertenecen a los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD) y el Movimiento Ciudadano (MC).
La crisis emanó de la advertencia de guerra de Ricardo Anaya, presidente del PAN, contra el gobierno y el Partido Revolucionario Institucional (PRI), por la designación de Ernesto Cordero para presidir la Mesa Directiva para el próximo periodo.
Este martes está convocada la Junta de Coordinación Política para deliberar sobre la situación ya que ni la Constitución ni la Ley Orgánica definen una salida en caso de que prevalezca un desacuerdo.
María Guadalupe Murguía, presidenta de la Cámara de Diputados, invitó Miguel Ángel Osorio Chong, Secretario de Gobernación y a los Coordinadores de Grupos Parlamentarios a establecer un diálogo público.
Esta reunión, explica Murguía, fue solicitada por los coordinadores de tres partidos con carácter de urgente y pública, al considerar la situación extraordinaria la cual requiere diálogo y definiciones.
Para los analistas no se vislumbra solución inmediata aún cuando el Secretario de Gobernación actúe como mediador en el legislativo, al cual se le acumulan tareas por aprobar como el Quinto Informe de Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, recibido la pasada semana.