La sonda espacial Cassini ha finalizado de forma espectacular su extraordinario viaje de exploración por el sistema saturniano, sumergiéndose en la atmósfera del planeta gaseoso. La confirmación del final de la misión llegó al Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California, a las 11:55, tras haberse perdido la señal de la nave 83 minutos antes en Saturno, a unos mil 400 millones de kilómetros de la Tierra, informó el sitio oficial de la NASA.
La nave ardió poco después de entrar en las capas más externas de la espesa envoltura de gases que rodea al planeta. La nave utilizó el poco combustible que le quedaba en sus propulsores para mantener la antena orientada hacia la Tierra y transmitir datos hasta el último momento antes de perder el control y desintegrarse por completo por el rozamiento con el aire. La NASA ha planeado cuidadosamente esta maniobra para evitar contaminar las lunas del planeta, que pueden albergar vida. “Este es el final de la misión. Espero que todos estén orgullosos de este increíble éxito”, dijo Earl Maize, jefe del Programa Cassini.
Imagen: Última imagen de Saturno captada por Cassini el 14 de septiembre, cuando la nave se encontraba a 634 mil km del planeta / NASA/JPL
Cassini fue lanzada el 15 de octubre de 1997 y llegó a la órbita de Saturno el 30 de junio de 2004, llevando a bordo la sonda Huygens de la ESA, que aterrizó en Titán el 14 de enero de 2005. Durante las dos horas y media que duró su descenso, reveló la superficie que hasta ese momento había permanecido oculta para la densa atmósfera de la luna saturniana, mostrando un mundo de paisajes enigmáticamente similares a los terrestres.
La sonda espacial continuó realizando desde su órbita sorprendentes descubrimientos en Titán, dado que su radar localizó lagos y mares de metano y otros hidrocarburos, por lo que constituye el único lugar conocido de nuestro Sistema Solar con líquido estable en su superficie. En la atmósfera de esta luna, Cassini detectó numerosas moléculas orgánicas complejas, algunas de las cuales están consideradas componentes esenciales para la vida en la Tierra.
No obstante, las lunas de Saturno continuaron sorprendiendo con uno de los principales descubrimientos de toda la misión: la detección de columnas heladas procedentes de fisuras en el hemisferio sur de Encélado. Posteriormente se descubrió actividad hidrotermal en el fondo del suelo marino, lo que indicará que este mundo es uno de los lugares más prometedores para buscar vida fuera de la Tierra.
Muchos de los descubrimientos de Cassini pueden atribuirse a la longevidad de la misión, que ha incluido dos extensiones, lo que ha permitido a la nave abarcar la mitad del ciclo estacional de Saturno. La primera extensión se concedió con el fin de observar cambios a medida que el planeta alcanzaba el equinoccio, momento en que la luz del Sol incidió paralelamente sobre los anillos.