Naciones Unidas, 25 sep (PL) El Caribe fue una de las regiones más activas en el llamado a poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba durante el debate de alto nivel de la Asamblea General de la ONU, foro que concluye hoy.
Fiel a su tradición solidaria con la mayor de las Antillas y su pueblo, que lleva casi 60 años sometido a las sanciones unilaterales de Washington, la mayoría de los países miembros de la Comunidad del Caribe (Caricom) fijaron postura contra el cerco.
Bahamas, Barbados, Belice, Granada, Guyana, Jamaica, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Trinidad y Tobago abogaron desde el principal órgano deliberativo de la ONU por el levantamiento de un bloqueo que también recibió el rechazo de naciones de Latinoamérica, África, Asia, Europa y el Pacífico.
El viceprimer sanvicentino, Loius Straker, calificó las medidas hostiles de Estados Unidos contra Cuba de un retroceso anacrónico a la Guerra Fría, sin justificación lógica alguna.
A su turno en el podio, la ministra de Relaciones Exteriores de Surinam, Yildiz Pollack-Beighle, recordó la postura contundente de la comunidad internacional de cara al cerco aplicado y recrudecido por las últimas 11 administraciones en la Casa Blanca.
El año pasado, no hubo un Estado que votara contra la resolución para pedir el fin definitivo de esta decisión unilateral, que ha demostrado ser improductiva desde todos los ángulos, advirtió.
Varios representantes caribeños, entre ellos el presidente de Guyana, David Granger; y los cancilleres de Bahamas, Darren Henfield; Trinidad y Tobago, Dennis Moses; y Jamaica, Kamina Johnson Smith, se refirieron en la Asamblea General al impacto del bloqueo en el desarrollo de la mayor de las Antillas.
«Seguimos optimistas de que habrá una solución diplomática para poner fin a esta cuestión de larga data, y que de buena fe se levantará pronto el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba, el cual amenaza considerablemente su logro de un desarrollo sostenible», precisó Moses.
En su discurso ante la plenaria de los 193 Estados miembros de las Naciones Unidas, el presidente norteamericano, Donald Trump, ratificó el martes su intención de recrudecer las sanciones unilaterales impuestas a la isla, pese al rechazo que generan a nivel global.
Al respecto, el canciller cubano, Bruno Rodríguez, denunció la hostilidad de la Casa Blanca y subrayó que fracasará cualquier estrategia dirigida a destruir la Revolución.
Las decisiones de Trump satisfacen solo los intereses de un grupo de origen cubano del sur de la Florida, cada vez más aislado y minoritario, que insiste en dañar a Cuba y su pueblo por haber elegido defender, a cualquier precio, el derecho a ser libre y soberano, sentenció.
Rodríguez adelantó que el 1 de noviembre volverá a presentarse en la Asamblea General de la ONU un proyecto de resolución sobre la necesidad de levantar el bloqueo, una iniciativa similar a la que desde 1992 recibe en ese foro un categórico respaldo.
El Caribe reclama en ONU fin del bloqueo contra Cuba
Por Waldo Mendiluza