Madrid, 2 oct (PL) La selección española de fútbol comienza hoy su concentración de cara a los últimos partidos eliminatorios para el Mundial de Rusia 2018, con el centro de atención radicado en la convocatoria del defensor Gerard Piqué.
El central del Barcelona está envuelto en una gran polémica debido a su notable activismo, principalmente a través de su cuenta en la red social Twitter en la que posee más de 16 millones de seguidores, a favor de la celebración del referendo independentista que tuvo lugar el domingo en la comunidad autonóma de Cataluña.
Debido a esa postura, el jugador azulgrana resultó blanco de múltiples críticas por parte de aficionados y periodistas españoles sobre su llamado al equipo, a pesar de que en más de una ocasión manifestara que «jugar con la selección es un orgullo».
Tras la celebración a puertas cerradas en el estadio Camp Nou del partido entre el Barcelona y Las Palmas, Piqué expresó visiblemente emocionado su opinión sobre lo sucedido en esa región del noreste de España durante la jornada dominical, en la que se reportaron más de 800 personas heridas debido a la represión de la Policía Nacional y la Guardia Civil española.
En sus declaraciones, el defensa campeón del mundo en Sudáfrica 2010, además de condenar la actitud del gobierno de Mariano Rajoy, manifestó que «si molesto a alguien en la selección doy un paso al lado y me aparto».
No obstante, el también titular de Europa en 2012 señaló que «ir a la selección no es una cuestión patriótica. Hay que ir y rendir al máximo. No es una competición de patriotismo. Yo lo entiendo así», añadió.
Piqué debe arribar este lunes a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, en esta capital, para efetuar la primera sesión de entrenamiento antes de los duelos contra Albania e Israel, previstos para el 6 y 9 de octubre próximos.