Madrid, 4 oct (PL) El gobierno catalán mostró hoy su rechazo al discurso del rey Felipe VI y confirmó la continuidad de los planes hacia la independencia.
Según destacó este miércoles el portavoz de la comunidad autónoma, Jordi Turull, «en lugar de calmar las cosas, las palabras del monarca echaron más gasolina al fuego».
Para Turull, el soberano actuó como «vocero de la estrategia de Rajoy» y recriminó su mensaje como una «enorme irresponsabilidad».
El también Consejero de la Presidencia catalana destacó que el rey no pronunció la palabra «diálogo» y que no hizo «ninguna mención» a los heridos de las cargas policiales del útlimo domingo durante el referendo.
El discurso del rey fue defendido por el Partido Popular (PP), el socialista (PSOE) y algunos ciudadanos, mientras que el resto de las formaciones políticas lo criticaron severamente.
Este martes, el monarca dirigió un mensaje a la nación en el que aseveró que el comportamiento «desleal e inadmisible» de la comunidad autónoma pretendía «quebrar la unidad de España», y le pidió cumplir con la Constitución.
Ante esta situación, que calificó de extrema gravedad, subrayó que es responsabilidad de los legítimos poderes del Estado asegurar el orden constitucional y el normal funcionamiento de las instituciones, la vigencia del Estado de Derecho y el autogobierno de Cataluña.
«Esas autoridades, de una manera clara y rotunda, se han situado totalmente al margen del derecho y de la democracia», remarcó el jefe del Estado español.
Por último, Felipe VI ratificó el «firme compromiso de la Corona con la Constitución y con la democracia, mi entrega al entendimiento y la concordia entre españoles, y mi compromiso como Rey con la unidad y la permanencia de España».