Madrid, 8 oct (PL) Una multitudinaria marcha recorrió hoy las calles de Barcelona en rechazo a la independencia de Cataluña, cuyas autoridades celebraron el 1 de octubre un referéndum secesionista considerado ilegal por la justicia y el gobierno de España.
Bajo el lema Basta, recuperemos la sensatez, la manifestación fue convocada por Sociedad Civil Catalana (SCC) para mostrar -subrayó esta plataforma- a la «mayoría silenciosa» de Cataluña, en alusión a un hipotético sector mayoritario opuesto a la escisión de esa región.
La protesta, en la que se corearon proclamas hostiles al presidente de la Generalitat (ejecutivo catalán), Carles Puigdemont, fue respaldada por el conservador Partido Popular, del jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, y los liberales de Ciudadanos.
Según el diario Público, la concentración contó también con el apoyo de organizaciones de extrema derecha, como Plataforma Cívica o Falange.
Entre los manifestantes -más de un millón de acuerdo con SCC, una cifra rebajada a 350 mil por la policía local- se encontraban varios miles procedentes de distintas urbes españolas, que fueron trasladados a la llamada Ciudad Condal en cientos de autobuses.
Puigdemont comparecerá el próximo martes en el parlamento regional, donde, en opinión de algunos analistas, podría realizar una declaración unilateral de independencia con el sostén de las fuerzas separatistas, que ostentan la mayoría de la cámara autonómica.
Poco más del 90 por ciento de los casi 2,3 millones de personas que participaron el pasado domingo en el referendo de autodeterminación, suspendido por el Tribunal Constitucional a instancias de Rajoy, se pronunciaron a favor de la secesión.
El no a la independencia fue la variante elegida por el 7,83 por ciento de los asistentes en la polémica consulta (177 mil 547 personas), mientras que el 1,98 por ciento restante (44 mil 913 ciudadanos) votó en blanco.
Más de 5,3 millones de ciudadanos estaban llamados a responder a la pregunta: «¿Quiere usted que Cataluña sea un Estado independiente en forma de república?».
La logística del referéndum sufrió duros golpes judiciales y policiales que entorpecieron su celebración y cuestionaron seriamente su legitimidad.
A esas dificultades se sumó el cierre, el propio 1 de octubre, de unos 400 colegios electorales por parte de la Policía Nacional y la Guardia Civil, los dos institutos armados españoles, cuyas cargas contra ciudadanos inermes recorrieron el mundo.
En una entrevista publicada este domingo en el diario El País, Rajoy no descartó suspender el autogobierno de Cataluña, como le permite el artículo 155 de la Constitución, en caso de una declaración de independencia por parte de Puigdemont.