Washington, 24 dic (PL) El año 2017 podría ser el más caro en la historia de Estados Unidos en términos de desastres naturales, por el fuerte impacto de huracanes, inundaciones, mareas e incendios como el que sigue afectando hoy a California.
De acuerdo con un artículo de la revista The Atlantic, los eventos reportados en los últimos 12 meses son también una muestra de las pérdidas por billones de dólares que se registrarían en el futuro a causa del cambio climático.
Hubo huracanes que dejaron inundaciones bíblicas en Texas y Florida, y devastaron Puerto Rico y las Islas Vírgenes. Hubo incendios que quemaron zonas vinícolas y cubrieron Montana y Oregón de cenizas, y los incendios que están quemando casas en Santa Bárbara, recordó la publicación.
A esos desastres se unieron la llamada Marea Rey en Miami, Florida, las olas de calor que golpearon el suroeste del país y los tornados registrados el sureste.
Debido a la influencia de esos eventos, la Administración Nacional Oceanográfica y Atmosférica consideró que este es el segundo año con clima más extremo, citó The Atlantic.
Ese comportamiento extremo tuvo un costo humano devastador, además del mencionado saldo económico, que quizás se sintió con más fuerza en términos de daños a la propiedad.
Por ejemplo, tras el paso del huracán María por Puerto Rico, el gobierno local pidió 95 mil millones de dólares para reconstruir la red eléctrica, la infraestructura y los hogares.
La agencia de calificación crediticia Moody’s calculó que hubo un saldo de 40 mil millones en producción económica perdida y de 55 mil millones en daños a la propiedad en el territorio con estatus de Estado Libre Asociado.
En tanto, la administración estimó que los huracanes Harvey e Irma provocaron pérdidas por 131 mil millones de dólares en estados como Texas y Florida.
A su vez, los fuegos golpearon con intensidad diferentes territorios, sobre todo California, donde el Thomas Fire sigue ardiendo tras estallar el 4 de diciembre y es ya el mayor siniestro desde 1932, cuando comenzaron a recopilarse oficialmente datos de ese tipo.
Solo en octubre pasado, varios fuegos ocurridos a la vez en ese estado de la costa del Pacífico cobraron la vida de 44 personas y, según el Departamento de Silvicultura y Protección contra Incendios, provocaron 9,4 mil millones de dólares en daños.
Esa cifra en realidad es mayor, pues no toma en cuenta las pérdidas de estructuras y bienes no asegurados, y a ella habrá que sumar el saldo económico de los fuegos de este mes.
Hasta septiembre pasado, cuando se realizó el último conteo al respecto, Estados Unidos contaba 15 desastres naturales con perjuicios de más de mil millones de dólares cada uno.
Entonces la nación norteña ya había sufrido tres huracanes, tres rachas de tornados, cuatro tormentas severas, dos inundaciones, una sequía, una helada e incendios forestales, a los cuales las entidades que monitorean esos eventos y sus costos sumarán después los datos del último trimestre.