Washington, 18 abr (PL) El presidente estadounidense, Donald Trump, negó hoy que el exdirector del Buró Federal de Investigaciones (FBI), James Comey, fuera despedido por la pesquisa sobre las elecciones de 2016, lo cual contradice comentarios previos del mandatario.
Trump sorprendió y generó gran controversia cuando el 9 de mayo de 2017 sacó del puesto al extitular, quien encabezaba las indagaciones sobre una presunta interferencia rusa en los comicios de hace dos años y una supuesta complicidad con el equipo de campaña del republicano.
«El resbaladizo James Comey, el peor director del FBI en la historia, no fue despedido por la falsa investigación de Rusia, en la que, por cierto, ÂíNo hubo colusión (excepto por los demócratas)!», manifestó el gobernante en Twitter.
Cuando el presidente despidió al exjefe de la agencia federal, la Casa Blanca citó inicialmente una recomendación del vicefiscal general del país, Rod Rosenstein, quien criticó la forma en que Comey condujo la pesquisa sobre el uso de un servidor privado de correo electrónico por parte de la ex secretaria de Estado Hillary Clinton.
Sin embargo, el presidente declaró luego a la cadena NBC News que estaba pensando «en lo de Rusia» cuando decidió despedir a Comey, porque se trataba de una historia inventada por los demócratas «por haber perdido una elección que debían haber ganado».
Trump aseguró entonces que, más allá de la recomendación de Rosenstein, él ya estaba pensando en sacar al exdirector del cargo.
Según The Washington Post, para Trump es importante destacar que Comey no fue despedido debido al tema de los comicios, porque se rumorea que el fiscal especial Robert Mueller, quien lleva ahora esa pesquisa, está indagando si el presidente procedió de ese modo para acabar con la investigación.
A decir del diario, solo hay un problema con el tuit de Trump, y es que una fuente prominente de Washington ya proporcionó evidencia sólida de que la pesquisa sobre la supuesta interferencia rusa fue exactamente la razón para el despido.
En los últimos días el republicano retomó los ataques contra Comey, a quien acusó de ser débil, mentiroso y una persona despreciable.
Por su parte, el antiguo jefe del FBI lanzó ayer al mercado su libro Una lealtad mayor: verdad, mentiras y liderazgo, en el cual incluye fuertes críticas contra el mandatario y calificó a su administración de «incendio forestal» que le está causando graves daños a las normas y las tradiciones de Estados Unidos.