Luis Foncerrada Pascal, director del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), calificó como “una locura” la insistencia del candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador de impulsar la autosuficiencia alimentaria del país y evitar depender del extranjero.
El tres veces candidato a la Presidencia de la República reiteró esta propuesta durante el segundo debate realizado en Tijuana, Baja California. Sin embargo, aplicar esa medida significaría “regresar a un pasado que ya probó ser terriblemente ineficiente”, acentuó Foncerrada Pascal.
El economista señaló que la idea implica poner barreras al comercio con otras regiones del mundo e incluso al acceso a nuevas tecnologías para el campo agrícola y a las experiencias positivas de otras naciones. “Es como cerrar la economía y nunca más tener acceso a los beneficios”, consideró.
México debe especializarse en aquellos alimentos que pueda producir de manera más eficiente y adquirir de otros países los que no siembre de dicha forma, apuntó el especialista al citar la teoría del economista inglés, David Ricardo.
Foncerrada Pascal explicó que el imponer la medida sería como acudir a Chiconcuac, Estado de México, para adquirir fresas. “Nos van a salir carísimas porque ahí son malas, chiquitas y sin sabor”, comentó.
Lo ideal es que los productores de Irapuato, Guanajuato, vendan los frutos rojos a los de la localidad mexiquense y, a su vez, compren los suéteres de lana que fabrican los otros, comentó.
El economista insistió en que el subsidiar a los productores del campo para que México produzca los alimentos que consume “es una locura y es como irte a la época de las cavernas, cuando se decía ‘sólo voy a cazar en mi territorio y (…) comer lo que se dé en mi huerto’”.
Para Juan Pablo Rojas Pérez, presidente de la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México (CNPAMM), los subsidios mal aplicados han llevado a que la población sea altamente dependiente de éstosporque se carece de atención y asesoría.
Subrayó que este problema ha generado desatención y el abandono de las tierras, de ahí que la productividad y la competitividad de México vayan a la baja.
Roja Pérez coincidió en que la autosuficiencia alimentaria es “un tema del pasado” porque hoy en día se demandan bienes y servicios que no se tienen o conocen en México.
“Ningún país en el mundo produce todo lo que consume”, resaltó el líder de los maiceros, quien enfatizó que lo necesario es una política agroalimentaria integral para apoyar al campo mexicano.
Refirió que esa política debe considerar al extensionismo rural y la tecnología como ejes principales para aprovechar el potencial productivo del campo a una mayor escala, lo cual dará impulso a la competitividad y certeza al campo mexicano frente a otros países.
Rojas Pérez exigió a los candidatos presidenciales que definan su política agrícola en caso de que lleguen al poder, a fin de garantizar que la población tenga dónde producir y, con ello, pueda crear más empleos para frenar una migración que es persistente desde los años noventa.
El líder maicero incluso pronosticó que si López Obrador gana las elecciones el próximo 1 de julio, las inversiones quedarían congeladas o fuera de México, a la espera de que los empresarios le tomen la confianza suficiente.