Guatemala, 4 jun (PL) Una foto del volcán de Fuego a primera hora del día de hoy hace inimaginable que pudiera dejar tanta desolación y muerte en la aldea de El Rodeo, en el sureño departamento de Escuintla, el más golpeado.
Desde las 05:00, hora local, los cuerpos de bomberos voluntarios reanudaron las labores de búsqueda en las faldas del coloso y poblados aledaños que aún permanecen bajo lodo, arena, ceniza, e incomunicados.
En medio de la tragedia, la solidaridad empieza a florecer entre los guatemaltecos para ayudar a quienes han perdido todo y las redes sociales divulgan las direcciones de los centros de acopio para donaciones con la etiqueta Tiempo de ayudar.
Según el último parte de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres en la madrugada, la cifra de fallecidos se mantiene en 25 y son casi dos millones las personas afectadas, pero aún es imposible saber el total de desaparecidos y se siguen localizando cuerpos sin vida.
El trabajo de los grupos de socorro se dificulta por la cantidad de material piroclástico depositado en la zona, por lo que a cada rato deben retroceder ante la elevada temperatura de esa mezcla de gases volcánicos , materiales sólidos y aire atrapado que se mueve a nivel del suelo.
Autoridades de la aeronáutica civil precisaron que las labores de limpieza terminaron en la pista del aeropuerto internacional de La Aurora después de una noche de intensa labor y que permitiría reanudar los vuelos en las próximas horas.
La segunda erupción del volcán en 2018, la más potente en los últimos años, fue particularmente intensa en los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, los cuales fueron declarados en Estado de Calamidad Pública por 30 días en un Consejo de Ministros extraordinario.
El país amaneció con las banderas a media asta, un luto que durará tres días, según decreto firmado por el presidente de la República Jimmy Morales.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), la actividad de volcán de Fuego concluyó la víspera a las 22:00, hora local, aunque no se descarta una reactivación de la erupción.
El ente científico precisó que los retumbos y la onda de choque desaparecieron y el último flujo piroclástico ocurrió a las 18:45, hora local.
Sin embargo, el Insivumeh advirtió que existe aún ceniza en el ambiente a una distancia de 20 kilómetros en el perímetro volcánico y el peligro de eventuales lahares (flujo de sedimento y agua) en los próximos días ante la alta probabilidad de lluvias en todo el país.
Es por ello que se mantendrá la alerta roja en los departamentos de Sacatepéquez, Escuintla y Chimaltenango, y la anaranjada en todo el territorio nacional.