Ottawa, 14 jun (PL) La reciente visita a Estados Unidos de la canciller canadiense, Chrystia Freeland, constituyó una muestra más de que las relaciones entre Ottawa y Washington atraviesan hoy su peor momento en varias décadas.
A juicio del diario The Globe and Mail, existe un consenso general de que los nexos entre dos de los aliados más cercanos del mundo están ahora en un punto peligrosamente bajo.
La dirección del periódico informó que en los últimos días recibió docenas de cartas de ciudadanos estadounidenses en rechazo a la actitud del presidente Donald Trump respecto a Canadá, en particular su conducta durante la Cumbre del Grupo de los Siete (G7) que tuvo lugar en esa nación el 8 y 9 de junio.
Una de las misivas que reproduce el rotativo señala: «en nombre de nuestros compatriotas, mi esposa y yo queremos hacerles llegar nuestras más sinceras disculpas por el comportamiento infantil del Presidente (…) tengan paciencia porque muchos de nosotros trabajamos para demoverlo y restaurar nuestra democracia…»
En ese contexto Freeland estuvo en la capital norteamericana el 12 y 13 de junio, donde se reunió con legisladores y recibió el premio de Diplomática del Año que le otorgó la revista Foreign Policy.
Al agradecer dicho galardón, dijo en su discurso que los aranceles absurdos impuestos por Trump a varios de sus aliados constituyen un ejemplo crudo de que ese país viola las mismas reglas que ayudó a elaborar, y alertó sobre la necesidad de preservar el orden mundial «con o sin la presencia de Estados Unidos».
El periplo de la jefa de la diplomacia también se realizó tras la amplia repercusión que tuvo la decisión de Trump del pasado 1 de junio de elevar los aranceles a las importaciones de acero y aluminio de Canadá, México y la Unión Europea, que profundizaron el deterioro de los vínculos bilaterales, ya afectados por las complicaciones en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Freeland fue la primera funcionaria canadiense en llegar a Washington D.C., después de que Trump y dos de sus asesores económicos lanzaron ataques personales contra el jefe de gobierno de Ottawa.
Al respecto, el sitio digital de la cadena CTV News reproduce este jueves de forma íntegra un comentario de la agencia Associated Press fechado en Toronto, según el cual la chispa de la confrontación no fue solo el tema de las tarifas y su justificación por motivos de seguridad nacional, sino que el gobernante estadounidense y sus principales consejeros calificaron a Trudeau como un traidor débil y deshonesto que merece ir al Infierno.