Por Irma Gallo
“Red Viral es una red de juventudes que trabajan en sus comunidades en temas de prevención del delito a través de muchos tipos de estrategia, es decir, de proyectos de arte, deporte, cultura, empoderamiento juvenil. Hay mucho trabajo con jóvenes que han estado en situación de pandilla o jóvenes y niños con muchos factores de riesgo presentes en sus comunidades”, nos explica Eunice Rendón. directora de Red Viral que reunió en una vecindad de Tepito a algunos de estos jóvenes que han creado estrategias para empoderar a sus comunidades: Pedro Carrizales “El Mijis”, diputado electo por la coalición Juntos Haremos Historia en San Luis Potosí, fue uno de quienes compartió sus experiencias de vida.
“Mi movimiento se llama Movimiento Juvenil Popular y nace a raíz de las cosas que yo viví en mi adolescencia, en mi niñez. Al igual que yo, hay muchos jóvenes que no pretenden ser de banda; sin embargo, las circunstancias los envolvieron, su entorno. Quise hacer visible la problemática que existe en ese sector y visibilizarlos como sujetos de derecho, empoderarlos en una sociedad que siempre los discrimina, por la apariencia”, dijo el ahora diputado electo.
Desde Ciudad Juarez, Antonio “Tony” Briones, habló de cómo su proyecto Cura la Violencia le ha cambiado el rostro a su comunidad. “Yo soy nacido en Ciudad Juarez. Nacido y criado en uno de los barrios populares de Ciudad Juarez, al poniente de la ciudad.” Desde su experiencia, Briones cree que “a las pandillas no hay que erradicarlas ni eliminarlas. Lo único que tenemos que hacer es darle un giro y sacar todas las cosas positivas que hay en un barrio.”
La única mujer en esta reunión, que tuvo lugar en una vecindad fue Mayra Valenzuela, miembro de Las 7 cabronas de Tepito, que dijo, “cuando llegó el Foro Viral, en el 2013 (sic) tenía poquitos meses de que había pasado una tragedia aquí. Y era exactamente la desaparición de trece jóvenes del barrio de Tepito. Ahí nadie gritó ‘Nos faltan 13’. Y nosotros tuvimos que hacerlo, y tuvimos que enfrentarnos con las autoridades. Hubo un momento en que fuimos invisibles. Porque muchas veces las mujeres aquí en Tepito somos invisibles. Y decíamos ¿por qué? Pues porque aquí el bailarín, el luchador, el futbolista, pero no la mamá, pero no la que es cabeza de familia…”.
Éste espacio de expresión y prevención, desde su inicio, ha acompañado tres mil proyectos semejantes en todo el país.