Por Ireli Vázquez
El 19 de septiembre de 2017 parecía un día normal, se conmemoraría el 32 aniversario del sismo ocurrido en 1985. El reloj marcaba las 13:14 horas cuando el suelo comenzó a moverse, la mayoría de las personas no comprendían lo que estaba pasando. Otro sismo el mismo día, pero 32 años después.
7.1 grados Richter con epicentro en la zona limítrofe entre Puebla y Morelos es lo que el Servicio Sismológico Nacional indicó. Un sismo que dejó en total 369 víctimas mortales; 228 en la Ciudad de México, 74 en el Estado de Morelos, 45 en Puebla, 15 en el Estado de México, 6 en Guerrero y 1 en Oaxaca, y dónde alrededor de 250 mil mexicanos se quedaron sin casa, informó la Secretaría de Protección Civil. Un sismo que dejó huérfanos a 53 menores, 38 edificios colapsados y miles con daños estructurales sólo en la Ciudad de México, mencionó Verificado.
Han pasado 33 años del sismo ocurrido en 1985 y uno del 2017, los cuales golpearon a la zona centro y suroeste de la República Mexicana. Dos sismos que sucedieron al país en diferentes años, contextos sociales y avances tecnológicos, pero que demostraron que la ciudadanía se puede unir en los tiempos más difíciles, y que, aunque a veces parezcamos indiferentes unos de los otros, en los momentos complicados podemos ser comprensibles y solidarios sin importar la edad o el nombre de la otra persona.
Es por este motivo que el Museo Memoria y Tolerancia de la Ciudad de México, conmemora los hechos con la exposición, Sismos 1985/2017. De los escombros a la esperanza, y Adán García, director académico del museo, nos cuenta los detalles de la muestra.
“El museo programa sus exhibiciones temporales hasta con cuatro años de anticipación, pero en este caso, por la coyuntura de lo sucedido el año pasado y con una necesidad de recordar y dar reconocimiento a las personas que ayudaron durante los hechos es que decidimos hacer una muestra temporal que demostrara lo que ocurrió el 19 de septiembre tanto de 1985 como de 2017. La exposición se encuentra conformada por 250 fotografías que pertenecen a 44 fotógrafos. Fue un esfuerzo de la coordinación de producción de exposiciones temporales el poder recaudar todos los archivos, ya que buscaron e hicieron el contacto con los dueños para poder exponer su trabajo, asimismo los investigadores del museo buscaron los fondos documentales de 1985. La exposición tiene un hilo conductor que va desde el testimonio y la noticia, y concluye con una energía emocional de llamado a la acción, donde la memoria de lo sucedido debe ser base para construir la resiliencia de la sociedad mexicana como la preparación para evitar tragedias humanas ante los desastres naturales.”
“La tecnología fue una de las principales armas de apoyo después de lo ocurrido. Tenemos el ejemplo de Verificado 19S, los medios que típicamente conocemos se vieron rebasados por la cantidad de información que se generaba en las redes sociales y también por la forma en que mucha gente participó como colmena, particularmente los jóvenes y generaciones que habían sido condenados o renegados y de los cuales se hablaba muy mal, fueron los grandes héroes, ellos consolidaron redes de información verificada, efectiva y eficiente, y que lo hicieron fue permitir tomar acciones y decisiones durante y después de lo sucedido.”
“Esta muestra invita a reflexionar, demuestra que como mexicanos y como parte de una sociedad que está fracturada por diferentes problemas sociales, económicos y políticos a veces rompemos con barreras que existen entre nosotros. Fuimos una comunidad de mexicanos que actuamos todos juntos para el bien común y que quizá habría que recuperar el sentimiento que deja esta exposición en ese sentido, de que todos somos iguales y cuando alguien necesite ayuda y nosotros tengamos la oportunidad de estar en una mejor sustitución podamos dar ese apoyo.”
La exposición Sismos 1985/2017. De los escombros a la esperanza se encontrará en la sala de exposiciones temporales del Museo Memoria y Tolerancia hasta el 28 de octubre.
Todas las imágenes © Ireli Vázquez / n22