La Conferencia del Episcopado Mexicano afirma que los obispos del país no serán oposición ni un muro de contención contra las acciones del próximo Gobierno.
Su presidente, Rogelio Cabrera López, señala no tienen ningún prejuicio contra el mandatario electo Andrés Manuel López Obrador, y reiteró la disposición de la Iglesia católica para trabajar con la nueva administración en la construcción de la paz.
Advierte expresarán su opinión sobre el escenario político de manera respetuosa.