Como inapropiados calificó la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, los abucheos y consignas que fueron lanzadas en su contra durante el funeral de estado de la gobernadora de Puebla, Martha Erika Alonso, su esposo el Senador, Rafael Moreno Valle, y tres víctimas más.
Aunque la funcionaria considera que la población esta en su derecho de manifestarse, Sánchez Cordero defendió que el gobierno federal acudió a la ceremonia con transparencia y la conciencia tranquila.
Informó además que el 21 de diciembre sostuvo conversaciones con la gobernadora, Martha Erika Alonso, para acordar una reunión.