Washington, 8 abr (Prensa Latina) La coalición Engage Cuba calificó hoy de acto cínico, cruel y gratuito la decisión de la administración de Donald Trump de cancelar un acuerdo entre las Grandes Ligas de béisbol estadounidense (MLB) y el país caribeño.
El Gobierno de Trump señaló que planea anular una resolución de la administración de Barack Obama (2009-2017) mediante la cual se hizo posible que los equipos de ligas mayores de Estados Unidos contraten a jugadores cubanos radicados en la isla, indicó en un comunicado la organización favorable al acercamiento entre las dos naciones.
Según recordó Engage Cuba, el ejecutivo previo había determinado que la Federación Cubana de Béisbol (FCB) no calificaba como una parte del Gobierno de la mayor de las Antillas.
A raíz de esa determinación, en diciembre pasado, la MLB y la FCB llegaron a un acuerdo para permitir que los equipos de ligas mayores firmaran directamente con peloteros cubanos en la isla, sin que estos últimos debieran abandonar su país ni se enfrentaran a los riesgos del tráfico de personas.
En ese momento se explicó que, en términos generales, las cláusulas del convenio eran similares a las establecidas por la MLB con otras ligas foráneas como la Liga Japonesa de Béisbol Profesional, la Liga de la Organización Coreana de Béisbol y la Liga de Béisbol Profesional de Taipei de China.
Sin embargo, el diario The Washington Post y otros medios estadounidenses reportaron este lunes la decisión de la administración norteamericana de dar marcha atrás al mecanismo, el cual había sido resaltado como histórico y celebrado por muchas voces en ambos países.
De acuerdo con la agencia Associated Press, el Departamento del Tesoro les dijo a los abogados de la MLB en una carta el viernes pasado que estaba revirtiendo la decisión de la administración de Obama que permite a las ligas mayores pagar a la FCB una tarifa de liberación.
El trato de la MLB con Cuba resolvió un problema horrible de trata de personas. Al romper ese acuerdo, la Casa Blanca ahora es responsable de esto y expone a los jugadores cubanos a abusos contra los derechos humanos, consideró Engage Cuba sobre esas informaciones.
James Williams, titular de la coalición, expresó que este «es un acto cínico, cruel y gratuito que apunta a apaciguar a una banda vocal de obstruccionistas empeñados en continuar una política fallida de aislamiento de 60 años».
«Los jugadores cubanos y sus familias merecen una solución real de la administración, no más política partidista», añadió.
A decir de Williams, deshacer este trato no es una victoria para Estados Unidos ni para el pueblo cubano. «Es solo una victoria para los de línea dura de intereses especiales en Florida y para los traficantes de personas y extorsionadores».