Durante la gira que realiza por Chiapas, el presidente Andrés Manuel López Obrador se entrevistó con médicos y enfermeras a quienes prometió que sus derechos labores no se afectarán con el plan que busca integrar todos los servicios de salud en un sólo organismo.
En medio de las protestas que encabezan policías federales, el mandatario aprovechó su estancia en Chiapas para informar que todo el personal de salud mantendrá sus condiciones laborales, sindicatos, sueldos, sistema de escalafón y pensiones, con los cambios que impulsará su administración.
Con el ánimo de atajar cualquier rumor, negó que la medida busque despedir personal.
Puntualizó que si procede la integración en dos grandes sistemas de salud -uno para atender a derechohabientes y otro para la población sin cobertura de salud-, habrá beneficios para los trabajadores.