Naciones Unidas, 23 sep (Prensa Latina) El presidente estadounidense, Donald Trump, manifestó hoy ser merecedor del Premio Nobel «por muchas cosas», pero acusó al comité de selección que otorga el reconocimiento de ser injusto en su entrega.
El mandatario norteamericano, impulsor de políticas criticadas en su país y a nivel internacional en áreas como inmigración y medio ambiente, se refirió al tema en declaraciones a la prensa durante un encuentro con el primer ministro paquistaní, Imran Khan, en el contexto de su participación en el segmento de alto nivel de la Asamblea General de la ONU.
Trump estaba discutiendo los últimos eventos en la disputada región de Cachemira, que se encuentra entre la India y Pakistán y es administrada por el primero de esos países, cuando manifestó que él tiene una muy buena relación con Khan y su homólogo indio, Narendra Modi.
Según el gobernante estadounidense, si en algún momento esas dos figuras dicen que tienen algunos puntos que quizás puedan resolver, él sería un árbitro extremadamente bueno. «Lo he hecho antes, lo crean o no, y nunca he fallado como árbitro», apuntó.
En un punto de la interacción con los medios, un periodista extranjero sugirió que si Trump logra hacer negociar con éxito a esas naciones, «muy probable y definitivamente» recibiría el Premio Nobel de la Paz.
Creo que obtendré un Premio Nobel por muchas cosas, si lo reparten de manera justa, lo que no hacen, expresó el jefe de Estado ante esa sugerencia.
El presidente norteamericano aprovechó el momento para criticar el hecho de que el Premio Nobel de la Paz sí le fue concedido a su predecesor en el cargo, el demócrata Barack Obama (2009-2017), un frecuente blanco de las críticas del actual mandatario.
«Lo entregaron, bueno, le dieron uno a Obama inmediatamente después de su ascenso a la presidencia, y él no tenía idea de por qué lo consiguió. ¿Y sabes qué? Eso fue lo único en lo que estuve de acuerdo con él», sostuvo.
Obama recibió el lauro en 2009, menos de nueve meses después de su llegada a la Casa Blanca, en reconocimiento a lo que el comité de selección describió como sus «esfuerzos extraordinarios para fortalecer la diplomacia internacional» y sus llamados a la no proliferación nuclear.
Tal entrega fue muy cuestionada en Estados Unidos y en el extranjero, no solo en ese momento sino al término de sus ocho años de mandato, porque muchas voces consideraron que el expresidente no tuvo ningún logro que justificara el importante galardón.
Por su parte, Trump ha planteado repetidamente la idea de que él también debe recibir el premio debido a sus esfuerzos por llevar la paz a la península de Corea, y en febrero pasado dijo que el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, lo nominó para el lauro, algo que no ha sido confirmado por el gobernante nipón.