El hecho de que los diputados hayan desechado la reforma constitucional para reducir al 50 por ciento el presupuesto a los partidos políticos causa que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, se lamente y por ello no descartó presentar una nueva iniciativa.
“Para febrero regresando en el nuevo periodo ordinario no lo descarto, porque es austeridad y lo he dicho varias veces la austeridad no es un asunto administrativo, es un asunto de principios, no puede haber gobierno rico con pueblo pobre, no pueden haber partidos ricos con votantes pobres, con ciudadanos pobres y a lo mejor faltó más explicación sobre la reforma”.
Además, el presidente de la república mexicana, señaló haber hablado con el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, a quien reiteró que las puertas de México están abiertas para él y para todos los luchadores sociales.