Washington, 22 ene (Prensa Latina) El congresista demócrata Adam Schiff acusó hoy al presidente estadounidense, Donald Trump, de abusar del poder de su cargo al utilizar una asistencia destinada Ucrania para mejorar sus posibilidades de reelección en noviembre.
El presidente solicitó interferencia extranjera en nuestras elecciones democráticas, abusando del poder de su oficina para buscar ayuda foránea con el fin de incrementar sus perspectivas de reelegirse en casa, expresó al comenzar la presentación de argumentos en el juicio político contra el mandatario.
Schiff, quien es el titular del Comité de Inteligencia de la Cámara de Representantes, encabeza el grupo de siete congresistas demócratas designados como gerentes (fiscales) del proceso.
El legislador por California agregó que Trump retuvo cientos de millones de dólares destinados a un socio estratégico para asegurar que Kiev apoyara su campaña de reelección. «En otras palabras, para hacer trampa».
Trump y sus partidarios afirman que no hubo nada inadecuado en sus llamados a que Ucrania lanzara una investigación sobre las elecciones norteamericanas de 2016 y otra sobre el exvicemandatario y precandidato presidencial demócrata Joe Biden, quien podría ser el rival del jefe de Estado en noviembre venidero.
Al mismo tiempo, el equipo legal del gobernante republicano ha argumentado que los dos artículos de juicio político aprobados en su contra, abuso de poder y obstrucción al Congreso, son constitucionalmente inválidos, porque no representan crímenes.
Para contrarrestar tales consideraciones, Schiff citó hoy a Alexander Hamilton, uno de los padres fundadores de Estados Unidos, quien dijo que un juicio político estaba justificado cuando existe un «delito contra el cuerpo político», incluido «el abuso o violación de alguna confianza pública».
En sus argumentos de apertura el representante de la fuerza azul les recordó a los miembros del Senado, los jurados del proceso, que realizaron un juramento de imparcialidad.
De acuerdo con el legislador, un jurado imparcial votaría para destituir a Trump de su cargo después de escuchar el caso en su contra, en el cual los demócratas sostienen que el presidente condicionó la entrega de la ayuda militar y la celebración de un encuentro con su homólogo Volodymyr Zelensky, a que Kiev anunciara las pesquisas demandadas por él.
A pesar de esos llamados, el propio líder de la mayoría republicana en la Cámara Alta, Mitch McConnell, dijo hace tiempo que no sería un jurado imparcial, y que coordinaría sus movimientos con la Casa Blanca.
Schiff y los otros fiscales tienen un tiempo máximo de 24 horas en tres días para tratar de convencer a los senadores de destituir al presidente, luego de lo cual el equipo legal de Trump dispondrá de un tiempo similar para realizar su defensa.
El resultado casi seguro es que Trump será absuelto por la fuerza roja, dado que se necesitan 67 de los 100 votos del Senado para removerlo, y hasta ahora ninguno de los 53 republicanos parece inclinarse en esa dirección.