Washington, 27 feb (Prensa Latina) Los resultados de una investigación que descarta la realización de fraude en las elecciones de octubre pasado en Bolivia, fueron publicados hoy por el diario estadounidense The Washington Post.
El proceso electoral fue cuestionado por la Organización de Estados Americanos (OEA) en su informe final a partir de supuestas irregularidades relacionadas con una detención preliminar del conteo de votos, el sistema informatizado, falsificación de firmas, alteración de datos y una cadena de custodia deficiente.
En el artículo ¿Ganó Evo?, sus autores, los investigadores del Laboratorio de Ciencia y Datos Electorales del Instituto de Tecnología de Massachusetts John Curiel y Jack R. Williams, recuerdan que a partir de ahí la maquinaria golpista echó a andar hasta consumar la renuncia de Evo Morales a instancias de las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional.
Sin embargo, en su investigación no encontraron evidencia para respaldar el reclamo de fraude electoral que sirvió de justificación a la derecha boliviana para dar el golpe de Estado y apoyar la instauración de un gobierno de facto.
Curiel y Williams anotan que más allá de los cuestionables señalamientos de OEA, sí era posible una victoria de Morales en la primera vuelta de las elecciones como determinó entonces el Tribunal Supremo Electoral, pues de acuerdo con las leyes bolivianas pudo hacerlo al acumular el 40 por ciento de los votos y una ventaja del 10 por ciento sobre su rival Carlos Mesa.
La investigación registra que no hay evidencia de una diferencia estadística significativa entre el margen de ventaja de Morales sobre Mesa antes y después de la mencionada detención preliminar del conteo de votos, más bien apunta a una ventaja superior a los 10 puntos porcentuales por parte del candidato del Movimiento al Socialismo.
De igual forma el análisis revela que el informe de la OEA destaca cambios en la tendencia de los votos tras la detención preliminar del conteo sin tener en cuenta una serie de variables.
En ese sentido destacan al votante trabajador que ejerce ese derecho más tarde en el día o los centros de votación ubicados en las áreas más pobres del país, donde las filas para votar son más largas, reduciendo así la posibilidad de un conteo rápido de las boletas.
La publicación de The Washington Post apunta además a la ausencia de un cambio drástico en los resultados antes y después de la detención preliminar del conteo o en la tendencia del voto, que siempre favoreció a Morales.
«No encontramos evidencia alguna de ninguna de estas anomalías», aseguraron Curiel y Williams tras analizar los datos anteriores y después del corte, quienes notificaron a la OEA sobre la investigación y aun no reciben respuesta.
«No hay ninguna evidencia estadística de fraude que podamos encontrar: las tendencias en el conteo preliminar, la falta de un gran salto en el apoyo a Morales después del alto y el tamaño del margen de Morales parecen legítimos. Con todo, el análisis estadístico y las conclusiones de la OEA parecerían profundamente defectuosos», concluyeron.