A medida que el brote de coronavirus continúa evolucionando, se han hecho comparaciones con la gripe estacional. Ante ello, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) aclaró que existen diferencias entre ambos virus y su propagación.
Explicó que los virus de COVID-19 y de la gripe tienen presentaciones clínicas muy parecidas debido a que ambos causan enfermedades respiratorias que pueden ser desde afecciones asintomáticas o leves, hasta padecimientos graves, y se transmiten por contacto con saliva.
Los datos reunidos hasta la fecha sugieren que 80 por ciento de las infecciones son leves o asintomáticas, 15 por ciento son infecciones graves y cinco por ciento son críticas.
“Estas parecen más elevadas que las observadas en el caso de la infección gripal”, mencionó.
La velocidad de transmisión marca una diferencia importante ya que el virus de la gripe tiene un periodo de incubación y un intervalo de serie corto.
“Se estima que el intervalo de serie de COVID-19 es de entre cinco y seis días, mientras que en el caso de la gripe es de tres”, señaló.
Además, el número de infecciones secundarias generadas a partir de un individuo infectado es de entre 2 y 2.5 para COVID-19, mayor que para la gripe estacional.
El organismo indicó que los niños se ven menos afectados que los adultos y las tasas de ataque clínicas del grupo de edad de cero a 19 años son bajas con el nuevo coronavirus. Con la gripe, por el contrario, este grupo etario, mujeres embarazadas, adultos mayores y personas con enfermedades subyacentes están en mayor riesgo.
Sobre la tasa de mortalidad, enfatizó que es mayor en COVID-19 pues oscila entre tres y cuatro por ciento. En el caso de la gripe estacional, ésta es inferior al 0.1 por ciento, aunque en ambos virus depende del acceso a la atención de la salud y la calidad de la misma.
Destacó que hasta el momento no se existen vacunas o terapias autorizadas para el nuevo coronavirus, mientras que para la gripe ya hay disponibles y deben aplicarse todos los años.