Aunque la aprobación presidencial en México mantiene una inercia negativa y sigue bajando, un los últimos tres días el ritmo fue menor después de que el presidente cambiara su discurso y pidiera a los mexicanos ayudar a «aplanar» la curva.
Esta semana las cifras de infectados y muertes por el COVID19 determinarán no solo nuestra situación sino la forma en que juzgaremos al presidente. Esperemos todo sea positivo y logremos superar la crisis.
ROY CAMPOS