La representación en México de la Organización de las Naciones Unidas recomendó al país reforzar la organización de hospitales para dirigir a los enfermos de coronavirus COVID-19 y anticipar alternativas en caso de que nosocomios lleguen a saturarse durante fase 3 de la pandemia.
En reunión virtual, representantes del organismo solicitaron no esperar a que los hospitales se queden sin camas disponibles para resolver dónde atender pacientes con COVID-19, sino que las acciones deben prevenirse y determinar a qué instalaciones médicas se dirigirán todos los enfermos que requieren asistencia médica, los que requieren ventiladores o aquellos a los que ya no se les puede dar tratamiento en caso de saturación.
Jean Marc Gabastou, especialista en salud pública y laboratorio, urgió además a que se lleve un mayor control de las pruebas aplicadas, pues se calcula que se han realizado 50 mil, no obstante, persiste un problema de subnotificación de casos positivos en el país, hay un problema de estructura debido a que las plataformas entre los estados no son compatibles y lo mismo ocurre con los laboratorios, lo que aumenta la tasa de letalidad.
Cristian Morales, representante de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en México, refirió que se trata de que los países expandan su capacidad de identificación, a fin de aislar a las personas que den positivo al virus y poder tratarlos y, al mismo tiempo, mantener al resto de la población en distanciamiento.
Asimismo, Jean Marc Gabastou solicitó que los insumos y equipos médicos se dirijan de manera prioritaria al personal de salud, quienes también deben contar con las medidas máximas de capacitación y protección, de acuerdo con los criterios definidos a nivel mundial.
El especialista destacó que los insumos y materiales también deben canalizarse, principalmente, a los sitios del país que registran mayor número de contagios, así como proteger a los que reportan menos casos mediante el impedimento de traslado de personas.
Antonio Molpeceres, coordinador residente del Sistema de Naciones Unidas en México, dijo que en el país se han dado muestras de que las acciones tomadas son las debidas, no obstante, la fase 3 requiere reforzar los modelos.
Respecto a la calidad de los insumos que adquiridos por el gobierno mexicano, detalló que la OMS ha elaborado una lista de insumos y las especificaciones que requieren, lo que se ha compartido específicamente con la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
No obstante, insistió en mejorar la coordinación en los servicios de salud para asegurar cuáles serán las referencias cuando se alcance el nivel máximo de contagio, cómo funcionarán los canales de comunicación y el intercambio de una institución a otra.
De igual forma, recomendó asegurar un salario mínimo a 10 millones de personas que se encuentran en alta vulnerabilidad, la cual aumenta durante la pandemia, no dejar de atender a los migrantes y, sobre todo, fortalecer la cooperación internacional porque ante el COVID-19 ningún país puede solo. Agregó que la propuesta de México ante la ONU figurará entre las medidas a tomarse en adelante.
Cristian Morales, representante de la OPS/OMS México, agregó que nuestro país ha tomado las medidas adecuadas, pero se requiere proteger las regiones con menos casos y evitar el desplazamiento de personas hacia esos lugares; que los habitantes se mantengan en cuarentena y se sigan medidas estrictas de higiene