Washington, 22 may (Prensa Latina) El presidente estadounidense, Donald Trump, llamó hoy a reabrir las iglesias y otros lugares de culto, tras atacar a gobernadores demócratas por considerar que se mueven demasiado lento en permitir el regreso a esos espacios.
El mandatario republicano, quien continuamente ha presionado por reabrir el país, a pesar de que todavía son altos los nuevos contagiados y fallecidos a raíz de la pandemia del coronavirus SARS-Cov-2, dijo que su administración emitirá una guía que califica a esos sitios de «esenciales».
Con el argumento de que Estados Unidos necesita «más oración, no menos», el jefe de la Casa Blanca pidió a los gobernadores reabrir los lugares de culto durante este fin de semana, previo al Memorial Day o Día de los Caídos, que se conmemorará el lunes.
De acuerdo con el diario USA Today, no quedó claro el impacto que tendrá el hecho de que el ejecutivo federal designe de tal modo esos espacios, pues son los funcionarios estatales y locales quienes deciden qué lugares son esenciales y hacen cumplir el distanciamiento social.
«Los gobernadores deben hacer lo correcto y permitir que estos lugares de fe esenciales muy importantes se abran ahora mismo, este fin de semana. Si no lo hacen, invalidaré a los gobernadores», sostuvo Trump este viernes en la Casa Blanca.
Pero medios norteamericanos de prensa señalaron que el mandatario no tiene autoridad para hacer eso, y luego la doctora Deborah Birx, coordinadora del Grupo de Trabajo sobre Coronavirus de la Casa Blanca, subrayó que la reapertura quedaba a discreción de los gobernadores y los líderes religiosos.
Creo que cada uno de los líderes de la comunidad de fe debería estar en contacto con su departamento de salud local para que puedan comunicarse con sus congregantes. Ciertamente, a las personas que tienen comorbilidades significativas, queremos protegerlas, sostuvo Birx.
A su vez, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, señaló que la decisión de reanudar las actividades sobre la base en la nueva guía federal depende «de los gobernadores», y no explicó qué autoridad usaría Trump para «anular» sus decisiones si determinaran mantener clausurados los lugares de culto.
Los cierres de esos espacios en medio de la actual pandemia han sido objeto de gran controversia en el país, sobre todo por voces que lo consideran una violación de los derechos constitucionales, e incluso el Departamento de Justicia apoyó a iglesias que desafiaron órdenes estatales de aislamiento.
Pero, al mismo tiempo, grandes congregaciones como las que ocurren en los lugares de fe se han relacionado con brotes del coronavirus.
Así sucedió en una iglesia rural de Arkansas, donde entre 92 asistentes, 35 dieron positivo al virus y tres murieron, según informaron esta semana los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.