México, 22 jul (Prensa Latina) La emboscada contra el jefe de la policía de la capital de México, Omar García, en Lomas de Chapultepec, hace tres semanas, fue posible porque se filtró información, concluye una investigación dada a conocer hoy.
Aunque el ataque mostró una gran capacidad de penetración de la delincuencia organizada en la capital del país y de corrupción, para poder ejecutarlo se necesitó más que armas, gente y dinero, expuso Francisco Rivas, director del Observatorio Nacional Ciudadano.
Fue necesario, señaló, un punto de corrupción, es decir, personal comprado que garantizara poder llevar a cabo ese atentado, y es evidente que lo hubo, porque si no, cómo sabían cuál era la ruta que iba a usar esa mañana, en específico, el secretario de Seguridad.
Desde hace tres semanas, la subsecretaría de inteligencia policial de la Secretaría de Seguridad Ciudadanob realiza investigaciones internas. Sin embargo, a pesar de haber detectado errores y omisiones que se cometieron principalmente en el «barrido» y retiro de vehículos sospechosos, y además de tener una vigilancia paralela al convoy de García el día del atentado, no se han delimitado responsabilidades hasta el momento.
Las investigaciones fueron realizadas inmediatamente, se intensificaron durante la primera semana después del atentado, luego se fueron descartando responsabilidades de mandos y algunos jefes de sector, se han buscado a detalle posibles filtraciones de sus actividades, pero de unos días para acá se mantiene en secreto la investigación, indicaron fuentes de seguridad.