La empresa Koniku, con sede en San Rafael, California, anunció que trabaja en el desarrollo de robots que puedan detectar el virus de COVID-19 más rápido que las pruebas convencionales.
La startup reveló que esta tecnología fusiona neuronas con un chip de silicio para crear un “cyborg olfativo” capaz de detectar olores que van desde explosivos hasta patógenos como el nuevo coronavirus.
Hace tres semanas dio inicio el primer ensayo clínico de Koniku el cual incluye muestras de pacientes que se realizaron la prueba de COVID-19, para comparar si el robot olfativo detecta el virus en comparación con los métodos tradicionales.
Los primeros ensayos ya han demostrado que el robot puede detectar con precisión la presencia de influenza A.
Los desarrolladores indicaron que los patógenos producen compuestos orgánicos volátiles únicos, que es como un tipo de huella dactilar, mismos que son liberados por las células enfermas.
Estos olores característicos de los patógenos son las mismas pistas biológicas que permiten a los perros olfatear docenas de enfermedades, por lo que con tecnología también podrán ser detectados.
El dispositivo llamado Konikore, es parecido un frisbee, pero de tamaño más pequeño y ya ha sido usado para detectar explosivos.
Cuando las proteínas de su chip se unen a un aroma que está programado para detectar, las células amplifican y procesan esas señales con la ayuda del aprendizaje automático, y el dispositivo se enciende.
“Nuestro objetivo es tener un dispositivo que combine la biología sintética con el silicio y mapee todos los olores de la vida humana a escala global”, dijo Oshiorenoya Agabi, director ejecutivo y cofundador de la compañía.
“Si un perro puede olerlo, nosotros también”, indicó Agabi, al describir a Konikore como una “cámara olfativa”.
Otros estudios científicos están tratando de entrenar a perros para detectar el virus SARS-CoV-2, en lo que ha sido calificado por los expertos como un método más barato y rápido.
Con información de (AMX Noticias)