México, 28 dic (Prensa Latina) Sorpresivamente, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció hoy el fin de sus conferencias de prensa matutinas conocidas popularmente como mañaneras y se hará una sola los miércoles.
Argumentó la inesperada decisión debido a lo que consideró un mayor y más objetivo avance en la información del país. Hay noticias ciertas, veraces, hay objetividad y no hace falta que estemos todas las mañanas informando aquí, explicó.
Anunció que se celebrará una conferencia de prensa semanal los miércoles, a las 12 del día; y que el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, asumirá su responsabilidad de forma más activa dando a conocer los boletines como era antes, para que se puedan reproducir las noticias que divulgue.
Las «mañaneras» se iniciaron hace poco más de dos años cuando López Obrador asumió la presidencia de Méxivo el 1 de diciembre, y nunca falló en darlas a las siete de la mañana, hora de Ciudad de México, salvo días feriados.
Si bien pocas veces las celebró los sábados y domingos, los fines de semana la sustituyó por numerosos Twitter o mensajes cortos televisados desde el Palacio Nacional o el lugar donde se encontraba.
Argumentó entonces para justificar ese tren de trabajo que se iniciaba con una reunión de su gabinete de seguridad a las seis de la mañana, incluidos fines de semana, con el hecho de que la prensa nacional, en sentido general, estaba controlada por la oposición y pululaban las noticias falsas y campañas contra su Gobierno.
De esa manera, convirtió las «mañaneras» en su principal instrumento de defensa y ataque a sus adversarios, una estrategia que ya había usado con éxito cuando fue gobernador de la capital, y que ahora fue muy criticada por los partidos políticos, pues en realidad eran un arma muy útil para el mandatario, quien lograba centralizarlas en el tema que más le interesara o era más atacado, para dar respuesta directa.