Yanbu, Arabia Saudita, 15 ene (Prensa Latina) Argentina y Chile celebraron hoy en la edición 43 del Rally Dakar con las victorias de Kevin Benavides y Francisco López, respectivamente, en las categorías de moto y auto ligero.
Benavides se adjudicó la corona manejando su motocicleta Honda, escudería que también festejó el segundo puesto del estadounidense Ricky Brabec, mientras que «Chaleco» López conquistó su segundo cetro después de coronarse por vez primera en 2019.
Brabec se agenció la duodécima y última etapa, con 2:17 minutos de ventaja sobre Benavides, suficientes para dejar amplia ventaja sobre su principal contrincante, el británico Sam Sunderland (KTM).
Esta es la primera vez que Honda consigue un doblete en el Dakar desde 1987, cuando el francés Cyril Neveu levantó el título, escoltado por el italiano Edi Orioli.
Por su parte, el chileno López concluyó el segmento final de 225 kilómetros a 12:30 minutos del vencedor del tramo, el británico Kris Meeke (Ph-Sport), pero le bastó para mantener la diferencia sobre el estadounidense Austin Jones, segundo mejor clasificado.
El año pasado llegamos terceros y este pudimos estar presentes, pese a lo que estamos viviendo a nivel mundial con la pandemia, y pudimos lograr el triunfo, así que muy contentos, por nuestro país, por nuestro Chile querido, expresó el chileno al concluir la carrera.
A las celebraciones de Benavides y López se unió el francés el francés Stéphane Peterhansel, quien se proclamó campeón por octava vez en la categoría de vehículos, y decimocuarta en total sumando las seis veces que subió a lo más alto del podio en motos.
El experimentado piloto galo obtuvo la corona justo el día en que se cumple el aniversario 30 de su primera victoria en una carrera de este tipo.
Conocido como «Monsieur Dakar», Peterhansel tenía prácticamente asegurada la victoria sobre el catarí Nasser Al-Attiyah (Toyota), su más cercano perseguidor, pero a una gran distancia.
De acuerdo con diversos reportes, el Rally Dakar 2021 estuvo marcado por las duras condiciones de la carrera saudí, donde la navegación alcanzó un mayor protagonismo que en otras ediciones.
Lo complicado del recorrido provocó que la velocidad pasara a un plano inferior y que la adaptación a las características de cada etapa fuera fundamental para obtener el triunfo, factor donde entró la experiencia de un Peterhansel que de la conocida carrera del desierto.