Ciudad de México, 18 de marzo de 2021.- Científicos anunciaron este jueves el descubrimiento de un fósil casi completo de un tiburón llamado Aquilolamna milarcae, que vivió durante el Período Cretácico, época en que los dinosaurios dominaban la tierra, y que, según los investigadores, es inusual, único, extraordinario y extraño.
El fósil, fue hallado en el estado de Nuevo León. Este espécimen vivió hace unos 93 millones de años y se alimentaba de plancton con una forma diferente a cualquier otra criatura marina conocida, recorrió el mar en lo que ahora es el noreste de México usando aletas alargadas que hacían su cuerpo más ancho que largo.
Tenía unas aletas de aproximadamente 1,9 metros y una longitud de la cabeza a la cola de aproximadamente 1,65 metros, lo cual, tiene asombrados a los científicos.
De acuerdo con el paleontólogo de vertebrados del Centro Nacional de Investigaciones Científicas de Francia (CNRS), Romain Vullo, autor principal del estudio publicado en la revista Science, las delgadas aletas pectorales el Aquilolamna actuaban principalmente como un estabilizador eficaz.
Aquilolamna es de hecho un ejemplo perfecto de una criatura extinta que revela una nueva morfología inesperada. Esto sugiere fuertemente que otras formas corporales y adaptaciones morfológicas sobresalientes pueden haber existido a través de la historia evolutiva de los tiburones”, dijo Vullo.
Su esqueleto era cartilaginoso, tenía el cuerpo en forma de torpedo y la cola de un tiburón, pero sus aletas pectorales eran absolutamente únicas. Según los investigadores parece haber sido un tiburón de natación lenta que se alimentaba de plancton a través de filtración, como lo hacen hoy los tiburones ballena y los tiburones peregrinos.
Mientras que la movilidad de las mantarrayas es como un vuelo submarino, con movimientos de sus poderosas aletas pectorales, las delgadas y largas aletas pectorales de Aquilolamna actúan más bien como las alas de un planeador”, dijo Vullo.
Vivía en mar abierto en una época en que los mares estaban poblados de reptiles marinos, parientes de los calamares con grandes conchas llamadas ammonites, peces y grandes tiburones. El depredador más grande en su ecosistema fue un tiburón llamado Cretoxyrhina, que medía 6 metros de largo.
Con información de (AMX Noticias)