El Fondo Monetario Internacional (FMI) dio a conocer este viernes 21 de mayo de 2021 una propuesta de 50,000 millones de dólares para acabar con la pandemia de COVID-19, que prevé que se vacune al menos al 40% de la población del mundo para fines de este año y al 60% para la primera mitad de 2022.
Los funcionarios del FMI dicen que hacerlo inyectaría el equivalente a 9 billones de dólares en la economía mundial para 2025 debido a una reanudación más rápida de la actividad, y destacó que los países ricos son los que más se beneficiarían.
La pandemia ha dejado más de 3.5 millones de muertos en todo el mundo y las proyecciones apuntan a unas perspectivas sanitarias muy desiguales hasta 2022, lo que supone “graves riesgos” para toda la población, según el FMI.
La directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, dijo en una cumbre sobre salud organizada por la Comisión Europea y el G20 que tiene sentido que las economías ricas aumenten las donaciones para garantizar un final más rápido de la pandemia.
“Las economías avanzadas -a las que se les pide que contribuyan más a este esfuerzo- probablemente verían el mayor rendimiento de la inversión pública en la historia moderna, captando el 40% de las ganancias del PIB y aproximadamente 1 billón de dólares en ingresos fiscales adicionales”, sostuvo.
La propuesta se basa en los esfuerzos ya realizados por Naciones Unidas, la Organización Mundial de la Salud y otros grupos.
La implementación costaría unos 50,000 millones de dólares, de los cuales 35,000 millones se pagarían con subvenciones de los países ricos y de donantes privados y multilaterales y los 15,000 millones restantes serían financiados por los gobiernos usando la financiación a bajo o ningún interés disponible en los bancos multilaterales de desarrollo.
OMS: Los países del G20 tienen los medios necesarios para vacunar al mundo
Por su parte, el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió hoy en el G20 de Sanidad de Roma que las grandes economías intensifiquen sus esfuerzos para una mejor distribución global de las vacunas anticovid, ya que, opinó, tienen los medios para garantizar que éstas lleguen a todo el planeta.
“El G20 tiene los medios necesarios para vacunar al mundo, y el mundo no puede esperar más”, señaló Tedros tras recordar que el 90 % de las dosis administradas en el planeta han sido inoculadas en los países de ese bloque.
El director general de la OMS dio la bienvenida a los compromisos de ayuda futura expresados por los gobiernos del G20 y otras economías en la actual cumbre sanitaria, pero aseguró que “deben traducirse en acciones en el presente, porque sólo en el día de ayer murieron 13,000 personas de COVID-19 y otras tantas lo harán hoy”.
“La gente seguirá muriendo mientras persista el desequilibrio en el reparto de vacunas. El desarrollo de éstas fue un triunfo de la ciencia, pero su dispar distribución es un fracaso de la humanidad”, subrayó Tedros.
“Sólo podemos terminar con la pandemia si todos tienen las herramientas necesarias para detenerla”, insistió el máximo responsable de la OMS, quien pidió también al G20 que aumente sus inversiones en el Acelerador ACT, el programa multilateral de desarrollo de terapias, vacunas y diagnósticos contra la COVID-19.
Tedros también reiteró su apoyo a un posible tratado internacional de preparación contra pandemias actualmente a debate, “que brindaría un marco para la responsabilidad política y redefina la forma en la que los países enfrentan las emergencias sanitarias”.
Finalmente, el director general de la OMS subrayó la necesidad de progresar en una cobertura sanitaria universal para hacer frente a nuevas pandemias que puedan llegar en el futuro.
“Esta pandemia ha mostrado que la salud no es un lujo sino la clave de la estabilidad política, y no será la última”, señaló Tedros.
“Hacer como si no hubiera pasado nada tras la pandemia producirá un mundo inseguro, insuficientemente preparado e injusto”, concluyó.