Washington, 9 jun (Prensa Latina) La microgravedad en el espacio afecta el sistema inmunológico de los astronautas, reveló hoy una publicación científica tras recopilar décadas de investigaciones de lanzamientos de cohetes tripulados, estaciones espaciales y viajes de transbordadores.
Los daños a la salud fueron descubiertos por primera vez durante las misiones de Apolo en la década de 1960, cuando experimentaron alteraciones del oído interno, arritmia cardíaca, presión arterial baja, deshidratación y pérdida de calcio en los huesos, informó el sitio digital Genetic Engineering and Biotechnology News.
El último estudio dirigido por una de las primeras mujeres astronautas, la fallecida Millie Hughes-Fulford, científicos de la Universidad de California (San Francisco) y la Universidad de Stanford asociaron los síntomas en parte a la activación anormal de las células reguladoras T (Treg).
Las Treg normalmente se activan para reducir las respuestas inmunitarias cuando la infección no es una amenaza y son reguladores importantes de las respuestas inmunitarias en enfermedades que van desde el cáncer hasta la Covid-19.
Precisó la investigación que en condiciones de microgravedad se detectaron cambios en las Treg, que las activaron incluso antes de que el sistema inmunológico fuera desafiado.
Un artículo titulado «Adaptaciones del sistema inmunológico a la microgravedad simulada reveladas por citometría de masa unicelular», publicado en Nature Scientific Reports, confirmó que al estimular una respuesta en células inmunes humanas, esos reguladores ayudaron a suprimir la réplica desencadenada.
Jordan Spatz, científico espacial y estudiante de medicina de la Universidad de California, comentó que, a medida que sean comunes y comercializados los viajes espaciales, es probable el incremento de preocupaciones sobre el estado de salud de los viajeros espaciales.
Spatz, también co-investigador principal del estudio después de la muerte de Hughes-Fulford, recordó que al principio del programa espacial la mayoría de los astronautas eran jóvenes y extremadamente saludables, pero ahora tienden a tener mucho más entrenamiento y son mayores.
«Desde una perspectiva médica espacial, vemos que la microgravedad le hace muchas cosas malas al cuerpo humano, y esperamos ganar la capacidad de mitigar algunos de los efectos de la microgravedad durante los viajes espaciales», concluyó.