Ciudad del Vaticano, 10 jun (Prensa Latina) El Papa Francisco expresó hoy que la familia de las naciones está llamada a dirigir su atención común a todos, especialmente a los miembros más pequeños y vulnerables.
El sumo pontífice envió un mensaje al Evento de Solidaridad realizado en Costa Rica con motivo del aniversario 30 de la creación del Sistema de Integración Centroamericana, al cual pertenece la Santa Sede como observadora desde 2012.
Tras señalar que el encuentro pretende movilizar apoyos para mejorar la situación de los desplazados forzados y comunidades de acogida en la región de Centroamérica y México, el papa abordó diferentes temas que afectan a los países de esa región.
La crisis sanitaria, económica y social provocada por el Covid-19 ha recordado a todos que los seres humanos son como el polvo. Pero polvo valioso a los ojos de Dios, que nos constituyó como una única familia humana, indicó.
En ese sentido, recordó que la familia natural educa en la fidelidad, sinceridad, cooperación y respeto, promoviendo la planificación de un mundo habitable y a creer en las relaciones de confianza, incluso en condiciones difíciles.
De la misma manera, precisó, la familia de las naciones está llamada a dirigir su atención común a todos, especialmente a los miembros más pequeños y vulnerables, sin ceder a la lógica de la competencia y los intereses particulares.
En estos últimos largos meses de la pandemia, dijo, la región centroamericana ha visto el deterioro de las condiciones sociales que ya eran precarias y complejas a causa de un sistema económico injusto, el cual, subrayó, desgasta a la familia, célula básica de la sociedad.
El papa puntualizó que así las personas sin hogar, familia, comunidad y pertenencias, quedan «a merced de situaciones altamente conflictivas y de no rápida solución» como la violencia doméstica, feminicidios, bandas armadas, criminales, tráfico de drogas y explotación sexual de menores y no tan menores.
Estos factores, mezclados con la pandemia y con una crisis climática caracterizada por una sequía cada vez más intensa y huracanes cada vez más frecuentes, han dado a la movilidad humana la connotación de un fenómeno forzado de masa, de manera que adquiere la apariencia de un éxodo regional, acotó.