Panomara gris para Biden ante tercer ola de Covid-19

Washington, 4 ago (Prensa Latina) La nueva ola de contagios de Covid-19 por la alta trasmisibilidad de la variante Delta del coronavirus SARS-CoV-2 en Estados Unidos, complica hoy el escenario al presidente Joe Biden.


El gobernante demócrata, quien hizo del combate a la pandemia uno de sus ejes de campaña para entrar en la Casa Blanca, confía en que la situación no llegue a límites que obliguen la vuelta al confinamiento.


De acuerdo con cifras oficiales, unos 90 millones de estadounidenses aún siguen sin inmunizarse cuando la curva de contagios sigue subiendo desde inicios de julio.


La última semana el país tuvo un promedio diario de 84 mil diagnosticados positivos al virus.
Para el mandatario este repunte es «una tragedia» para el país que «podría haberse evitado» y volvió a achacar las culpas a lo que denominó «la pandemia de los no vacunados».


Actualmente, uno de los estados con cifras ya alarmantes es Florida que representa alrededor del 6,5 por ciento de la población de Estados Unidos y es responsable del 21,6 por ciento de los nuevos casos registrados aquí.


Solo en los últimos tres días el sureño territorio notificó al gobierno federal casi 51 mil casos de Covid-19 y 100 muertes, mientras continúa el aumento de infecciones a un nivel no visto desde enero.


Según las estadísticas, el sureño territorio también batió su récord de hospitalizaciones por la enfermedad.


Los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) advirtieron también sobre el incremento de las infecciones en California y Texas.


En una serie de publicaciones en Twitter, la doctora Heather Haq, pediatra del Texas Children’s Hospital de Houston, dijo que «después de muchos meses de cero o pocos casos pediátricos de Covid-19, estamos viendo que los bebés, niños y adolescentes vuelven a ingresar en el hospital, cada vez más» por esa causa.


La más reciente guía de los CDC recomienda que los estadounidenses, incluso los vacunados, deben llevar máscaras en ambientes interiores concurridos en lugares donde la variante delta podría representar un alto riesgo de infecciones.


A más de un año de pandemia, Estados Unidos supera los 35 millones 800 mil enfermos y 629 mil 800 fallecidos por la enfermedad,  los peores datos a nivel mundial.