La Habana, 20 abr (Prensa Latina) Los 120 años del aislamiento del radio (ra), parteaguas en la ciencia nuclear, llevan ineludiblemente a evocar hoy a Marie Curie, una de las figuras más brillantes del siglo pasado.
Fue la primera mujer en recibir un premio Nobel e inauguró la casilla de las personas con dos (compartió con su esposo Pierre Curie y Antoine Henri Becquerel el de Física en 1903 y obtuvo en solitario en 1911 el de Química).
Maria Salomea SkÅéodowska-Curie nació el 7 de noviembre de 1867 en Varsovia, Polonia, fruto de un matrimonio de maestros, quienes la educaron y motivaron de manera excepcional, según destaca la literatura especializada.
El sueño de estudiar una carrera universitaria, algo impensable para una fémina en su país durante la época, condujo inicialmente a que ingresara en una casa de altos estudios clandestina.
Con los ahorros fruto del trabajo como institutriz y la ayuda del padre, en 1891 se instaló en París, Francia, y matriculó en la Universidad de La Sorbona, donde se licenció en 1893 en Física, como el número uno de su promoción, y un año después en Matemáticas.
En la primavera de 1894 conoció al profesor Pierre Curie, con quien se casó, tuvo dos hijas y desarrolló sus investigaciones, entre ellas la relacionada con materiales radiactivos, en la cual descubrieron dos sustancias nuevas que llamarán Polonio (po) y ra.
Concluyeron que la radiactividad reside en los átomos del elemento, algo fundamental en el análisis de la estructura atómica de la materia y con aplicaciones en medicina y otras disciplinas.