San Salvador, 01 jul (Prensa Latina) El Bitcoin se situó a la baja en su peor trimestre desde 2011, aunque las autoridades de El Salvador mantienen hoy su apuesta por esa moneda.
La alta inflación y las restricciones de liquidez aplicadas por los bancos centrales afectaron los mercados financieros y a las criptomonedas, y se reflejan en duras caídas en sus precios, impactando al sector en general con ventas masivas, valoró la revista Forbes Centroamérica,
Según el sitio Investing.com, el Bitcoin cayó hoy otro 4.4 por ciento, a punto de atravesar los 19 mil dólares de nuevo y cerrar su peor trimestre desde 2011, al acumular una caída en los últimos tres meses de 58 por ciento y pasar de 46 mil 296 al inicio de abril, a 19 mil 107 hoy.
Precisó Forbes que por ahora, el Bitcoin y las criptomonedas reflejan un comportamiento similar a los activos de riesgo y se aleja de ser un posible activo refugio.
Las proyecciones sobre este tipo de «moneda virtual» coincidieron este jueves con una decisión del Banco Central de Reserva de El Salvador (BCR) de recortar la proyección de crecimiento económico del país para el cierre de 2022 a un 2,6 por ciento, de un 3,2 por ciento previo.
Douglas Rodríguez, quien preside la entidad financiera dijo en una conferencia de prensa que entre los obstáculos que afectan la economía local se encuentran la desaceleración de la economía mundial y el impacto del conflicto entre Rusia, la OTAN y Ucrania.
Asimismo afecta en esta nación la crisis inflacionaria en Estados Unidos que alcanzó un 8,6 por ciento y la subida histórica de las tasas de interés.
Pese a los vientos en contra, Rodríguez se mostró optimista cuando aseguró que el crecimiento estimado para el cierre de 2022 es superior al promedio de décadas anteriores.
La proyección del BCS para el cierre de 2022 es menor a la del Banco Mundial y de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que a comienzos de junio vaticinaron desempeños del 2,7 por ciento y tres por ciento, respectivamente.
El titular del Banco sostuvo que la economía salvadoreña creció un 2,4 por ciento al cierre del primer trimestre del año en curso y dijo que no se prevé que el país caiga en una recesión pese a los temores manifestados por muchos economistas.