Washington, 22 ene (Prensa Latina) Todo indicaba que 2023 comenzaba con vientos políticos a favor para el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, después de unas elecciones de medio término que no se tradujeron para los demócratas en la «ola roja» que anticiparon los republicanos.
El mandatario estaba satisfecho porque su partido se libró de una pronosticada paliza en los comicios del pasado 8 de noviembre, además de la vergüenza que significó el caos de una dividida mayoría republicana que tardó 15 rondas de votación para elegir a su líder en la Cámara de Representantes.
Mientras, la inflación ※la peor en las últimas cuatro décadas※ empezaba a ceder y en Washington su eventual candidatura a la reelección la miraban con mejores ojos dentro de su formación partidista.
Atrás iban quedando también los hechos políticos más cuestionados por los ciudadanos del país en sus primeros dos años en el Despacho Oval, como la retirada de Afganistán en agosto de 2021, los problemas en la cadena de suministro o el manejo de la pandemia de la Covid-19, por solo citar algunos.
Todo ello afectó la imagen de un Biden que vio caer en picada el apoyo de los votantes a cifras que no rebasaron el 40 por ciento.Sin embargo, los comicios intermedios le dieron ese oxígeno necesario para adentrarse en 2023 y celebrar en enero sus 24 meses de estancia en la Casa Blanca.
Pero la aparente buena estrella desapareció el 9 de enero al transcender la noticia del hallazgo de documentos clasificados de su período como vicepresidente de Barack Obama (2009-2017) en su antiguo despacho personal.
Se dice que entre el material hay memorándums de los servicios de inteligencia estadounidenses y archivos sobre Ucrania, Irán y el Reino Unido.
Los documentos fueron descubiertos el 2 de noviembre del pasado año, seis días antes de las elecciones intermedias, pero los abogados deBiden solo lo reconocieron públicamente en fechas recientes.
Para los republicanos, esta constituye una nueva arma contra el actual ocupante del Despacho Oval, en particular porque en agosto de 2022, durante un registro de agentes federales a la residencia del expresidente Donald Trump (2017-2021) en Mar-a-Lago, Florida, se hallaron decenas de cajas con documentos clasificados.
El suceso, catalogado entonces como un hecho»sin precedentes», causó un enorme revuelo en Washington.
Pese al anuncio que hiciera Trump de su candidatura presidencial para 2024, su futuro político está en veremos. En cuanto a Biden, esto podría ser una enorme bola de nieve que al rodar se interpondría entre él y sus aspiraciones a un segundo mandato.
(Tomado de Orbe)