Washington, 28 mar (Prensa Latina) Los estragos causados por una docena de tornados que azotaron en días pasados a Mississippi, Estados Unidos, fueron mayores debido a la pobreza imperante en las comunidades afectadas, señaló hoy un reporte de una cadena noticiosa.
La mitad de las 26 muertes notificadas se produjeron en la ciudad de Rolling Fork, en Delta, donde un violento fenómeno con una trayectoria de casi 100 kilómetros golpeó el pasado viernes una localidad predominantemente afrodescendiente y donde el 21 por ciento de los residentes poseen escasos recursos, divulgó NBC News.
«El escenario estaba listo para el desastre mucho antes de que se formara el meteoro», declaró Stephen Strader, profesor asociado de geografía y medio ambiente en la Universidad de Villanova, en Pensilvania.
Agregó que los factores sociales chocaron con los climatológicos para crear el peor de los casos.
El predominio de casas móviles hizo que la ciudad de unas dos mil personas fuera particularmente vulnerable a las condiciones climáticas extremas, añadió la fuente.
En promedio, el 54 por ciento de las muertes relacionadas con tornados en Estados Unidos ocurren en este tipo de viviendas, según el Servicio Meteorológico Nacional.
Las personas que buscan protección en casas rodantes también tienen entre 15 y 20 veces más probabilidades de morir en comparación con quienes se refugian en otro tipo de construcciones, acotó el reporte.
Angelia Eason, forense del condado de Sharkey, donde se encuentra Rolling Fork, comunicó que ocho de las 13 muertes en la ciudad involucraron a personas en viviendas móviles.
Las encuestas preliminares sugieren que el tornado que golpeó la comunidad de Mississippi tenía vientos de más de 270 kilómetros por hora y fue clasificada como EF-4 (escala Fujita mejorada), de un máximo de cinco, difundió el Servicio Meteorológico Nacional en Jackson.
El profesor de meteorología en la Universidad Estatal de Iowa, William Gallus, añadió por su parte que muchos dueños de casas móviles no pueden evacuar o no tienen opciones prácticas para buscar refugio.
«En los estudios, dicen que simplemente no tienen ningún lugar al que puedan ir por seguridad. Les gustaría poder responder, pero no tienen esa opción», refirió.