Washington, 28 may (Prensa Latina) El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, y el líder de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, acordaron elevar el techo de la deuda durante dos años y aplicar nuevos límites al gasto federal, reportan hoy varios medios.
Ambas partes estuvieron semanas negociando y tuvieron que resolver sus diferencias en una lista de temas pendientes como los niveles de gasto más bajos, nuevos requisitos de trabajo para los programas de beneficios sociales y permitir reformas para acelerar la aprobación de la infraestructura energética, señala CBS News.
De acuerdo con el diario The Hill, McCarthy dijo que aún queda trabajo por hacer y que más tarde este domingo espera publicar el texto legislativo y realizar una votación en el pleno el miércoles siguiente.
La propuesta aún enfrenta grandes barreras para su aprobación, particularmente en la Cámara Baja, donde los conservadores no perdieron el tiempo en presentar el compromiso como una capitulación de McCarthy ante Biden.
Según los términos del convenio, los republicanos acordaron extender la autoridad de endeudamiento del gobierno por dos años, empujando la amenaza de incumplimiento más allá de las elecciones de 2024, como había exigido Biden, según The Hill.
A cambio, la Casa Blanca acordó congelar o aceptar pequeños recortes, en el gasto que no sea de defensa para 2024, lo que podría afectar los programas discrecionales favorecidos por los demócratas. El gasto en 2025 se incrementaría en uno por ciento, y no se aplicarían límites en 2026 y más allá, indicó la fuente.
Este acuerdo también aumenta la edad a la que los beneficiarios de cupones de alimentos deben buscar trabajo para ser elegibles, de 49 a 54 años, una solicitud clave de los republicanos.
Pero también facilitaría los requisitos de trabajo para otros grupos, incluidos los veteranos y las personas sin hogar, cambios diseñados para mejorar el trato para los demócratas.
Medicaid, según la fuente, no se vería afectado, ni el programa de alivio de préstamos estudiantiles de Biden.
El compromiso llegó tras once días de tensas negociaciones entre McCarthy, Biden y sus diputados designados y fue alimentado por una advertencia del Departamento del Tesoro, emitida solo un día antes, de que el gobierno se quedaría sin fondos para pagar todas sus obligaciones el 5 de junio.
Varios medios destacan que el acuerdo provocó aullidos inmediatos de ambos lados del pasillo, pues los «liberales» protestaron porque los recortes de gastos son demasiado drásticos y los conservadores objetaron que no son lo suficientemente drásticos.
Pero de acuerdo con expertos, esas críticas no fueron una sorpresa: siempre se esperó que un compromiso bipartidista capaz de ganar el apoyo de McCarthy y Biden alienara los bordes ideológicos de cada partido.