El Gobierno de la Ciudad de México “no cederá ni un milímetro en la lucha contra la tala ilegal de árboles ni en el cuidado del suelo de conservación”, advirtió el jefe de Gobierno, Martí Batres, tras el enfrentamiento entre talamontes y elementos del Ejército y de la Guardia Nacional, por el aseguramiento de aserraderos clandestinos en la zona sur de la CDMX, en los límites con Morelos y el Estado de México.
El jefe de Gobierno informó que la madrugada del miércoles, en una serie de operativos, se lograron desmantelar dos aserraderos en Ocuilan, Estado de México, y otros seis en Huitzilac, en el estado de Morelos.
Esto, al insistir en que las acciones van a continuar, porque “estamos ahorita en el menor momento de la batalla contra los talamontes y eso va a seguir”, tanto en la Ciudad de México, como en el Estado de México y en Morelos.
El jefe de Gobierno señaló que ya ha tenido reuniones con los mandatarios de ambas entidades, con el gobernador del Edomex, Alfredo del Mazo, y con el de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, para trabajar en una acción conjunta en contra de este problema que afecta a las zonas boscosas de Tlalpan, Milpa Alta, Cuajimalpa, Magdalena Contreras, en sus límites con el Estado de México y Morelos.
Porque, “los talamontes son de ambos estados y en muchos casos tienen sus centros de operación en los límites con la Ciudad de México”, además de que “muchas madererías” de la capital del país, hacen negocio con estos talamontes, refirió.
Este miércoles, una turba de talamontes quemaron tres camionetas y una plataforma y causaron daños a un tractocamión, todos de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural, donde estaban guardadas las herramientas con las que realizaban la tala de árboles y el traslado de madera.
En los actos violentos registrados en la México-Cuernavaca participaron además de talamontes, vecinos de Topilejo, en Tlalpan, por la supuesta retención de sus familiares, trabajadores de Corenadr, los cuales, de acuerdo con Martí Batres, “nunca estuvieron retenidos”.
La madera decomisada la madrugada del miércoles en los aserraderos de Ocuilan y Huitzilac, “aún está siendo contabilizada, pero se trata de miles de trozas”, que serán resguardadas, dijo por su parte el secretario de Gobierno, Ricardo Ruiz.
Por el ataque a los vehículos oficiales y daño al erario, la Corenadr presentará una demanda contra quien resulte responsable, adelantó Ricardo Ruiz.