Lima, 17 sep (Prensa Latina) Lo que la presidenta Dina Boluarte plantee sobre la compleja situación de los derechos humanos en Perú, concentra las expectativas sobre su participación en la Asamblea General de las Naciones Unidas, a donde llegó hoy.
Los comentarios previos a la partida se enfocan también en el tema de la institucionalidad democrática, cuya presunta precariedad generó la semana pasada una controversia entre el gobierno y la representación de las Naciones Unidas en Perú.
La secretaria ejecutiva de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos, Jennie Dador, comentó sobre el mensaje que dará la ONU en el foro de la ONU, que la comunidad internacional espera avances en las investigaciones de media centenar de muertes en las protestas que generó el ascenso, por sucesión, de Boluarte a la presidencia.
Por eso, indicó, la mandataria «tiene que presentar avances en términos de investigación y justicia» para las víctimas de la violencia registrada entre diciembre de 2022 y marzo de 2023, que han motivado reclamos del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos.
Dador cuestionó una declaración de Boluarte, en la cual anunció que en la ONU planteará que su gobierno mantiene respeto irrestricto a los derechos humanos y a la institucionalidad democrática.
Señaló que en el primer caso y pese al tiempo transcurrido, no hay avances en las investigaciones.
«La comunidad internacional espera avances; ella tiene que presentar avances en términos de investigación y justicia», afirmó.
Otros críticos del gobierno señalan que este se mantiene neutral ante una ofensiva parlamentaria que apunta a destituir a los miembros de la Junta Nacional de Justicia, organismo clave que designa y fiscaliza a jueces y fiscales.
Justamente anoche, más de 60 organizaciones sindicales, agrarias, vecinales, políticas, religiosas y sociales en general, protestaron contra lo que consideran arremetida derechista para consolidar una dictadura parlamentaria.
Para la experta jurídica internacional en derechos humanos Krúpskaya Ugarte, Boluarte debe asumir ante la Asamblea General el compromiso de respetar la autonomía del sistema de justicia.
El catedrático «Oscar Vidarte apuntó que para el gobierno es fundamental construir legitimidad internacional, pues ha sido muy cuestionado en su legalidad y por violaciones de derechos humanos.
El analista internacional añadió que en su intervención en la ONU, la mandataria debe dar explicaciones sobre las muertes en las protestas sociales, tema que, dijo, «pende como una espada de Damocles sobre el comportamiento internacional del Perú».
El conservador analista internacional Francisco Belaúnde admitió que un posible discurso de Boluarte en la ONU sobre democracia e inversiones puede contrastar con algunos actos del Gobierno y del Congreso que atentan contra el Estado de derecho.